Estamos hablando de un hito por superar: el de los cincuenta. Sinónimo de renovación, también impacta en nuestro cabello. De hecho, después de los cincuenta años, el cabello pierde densidad, brillo y, a veces, incluso se vuelve más espumoso con los cambios hormonales. Sin embargo, estos cambios no significan que tengas que renunciar a un corte elegante. La famosa estilista Delphine Courteille, que cuida el cabello de estrellas como Inés de la Fressange, nos revela sus trucos y consejos.
La plaza, un valor seguro
“A los 50 años, el cabello suele empezar a adelgazarse y es entonces cuando el bob se convierte en un gran aliado”, explica Delphine Courteille. Dependiendo de tus deseos pero sobre todo de tu morfología y textura, son posibles varios estilos de cuadrados. El bob largo, por ejemplo, es ideal para quienes quieren “camuflar la base de las mejillas o los signos del paso del tiempo”. Este tipo de corte alarga sutilmente la silueta a la vez que enmarca el rostro.
Para un look más atrevido, el micro-bob, también conocido como bob corto estilo Angèle, un poco más estructurado, es una solución para aportar el máximo volumen. “El bob revitaliza el cabello y le da movimiento, lo cual es perfecto para cabellos debilitados por la edad”, añade.
Pelo corto: ¿una obligación?
Al contrario de lo que podría pensarse, adoptar un corte de pelo corto después de los cincuenta años no es una solución universal. “El pelo muy corto a veces puede acentuar los rasgos, en particular el óvalo de la cara, o incluso marcar arrugas, como las líneas de expresión o las patas de gallo”, explica Delphine Courteille. Para quienes quieran suavizar estas zonas, la peluquera recomienda opciones como el flequillo tipo cortina o una versión setentera que viste elegantemente la frente.
En cuanto a la longitud, no debería prohibirse. Esto es lo que cada vez más famosos nos demuestran. “Mire a Marion Cotillard, Vanessa Paradis o incluso Virginie Efira. Demuestran que es perfectamente posible lucir largo sin dejar de ser elegante”, analiza el profesional. ¿La clave? Juega con los detalles: añade clips para una noche o trabaja con ondas de luz para añadir volumen.
Mejorar tu textura: errores a evitar
Con la menopausia o la premenopausia, el cabello puede volverse espumoso, un problema común pero no insuperable. “Solo hay que tomar las medidas adecuadas y evitar errores como calentar el pelo con el secador demasiado cerca o utilizar aparatos calentadores como placas con demasiada frecuencia”, advierte Delphine Courteille. Ella aconseja invertir en tratamientos caseros o de salón que mejoren la textura del cabello sin apelmazarlo. “Y sobre todo, cuidado con los productos que contienen silicona, que apelmazan el cabello, matan el volumen y pueden provocar caspa”, advierte.
¿Cómo encontrar tu corte característico?
Para elegir tu corte ideal a los 50 años, Delphine Courteille insiste en una cosa: tener en cuenta la forma de tu cuerpo y la evolución de tus rasgos, en lugar de seguir las tendencias del momento. “¿El último consejo? Consigue encontrar un peluquero que sepa adaptarse a tu rostro, a tu textura de cabello y a tus problemas específicos. El corte debe equilibrar y no acentuar las zonas sensibles. »
En resumen, Delphine Courteille advierte que no existe un corte mágico que se adapte a todas las personas de 50 años (y más), pero recomienda centrarse en un peinado que combine volumen, brillo y estructura, respetando la textura natural del cabello. Un bob bien pensado o un largo trabajado, pero sobre todo un corte a medida que evoluciona al mismo tiempo que el rostro.