Brasil acaba de dar un paso decisivo en su estrategia de diversificación energética al firmar un acuerdo de tránsito con Bolivia. Este acuerdo, entre TotalEnergies, Matrix Energy y la empresa boliviana Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), permitirá que el gas natural argentino llegue a la infraestructura brasileña, declaró el Ministerio de Minas y Energía de Brasil.
Una iniciativa respaldada por el G20
Este progreso es parte de un marco de cooperación regional reforzada, iniciado en la cumbre del G20 en Río de Janeiro en noviembre pasado. Brasil y Argentina firmaron un acuerdo bilateral para estudiar opciones de transporte de gas. A corto plazo, el uso del gasoducto GasBol que une Bolivia con Brasil resulta ser la solución más viable. Con una capacidad instalada de 30 millones de metros cúbicos por día, este oleoducto ha estado operando recientemente por debajo de su capacidad debido a la caída de la producción en Bolivia.
Acceso Rápido a la Producción de Vaca Muerta
Argentina, que recientemente reorganizó su infraestructura, ahora ha aumentado su capacidad de transporte gracias a la reversión de los oleoductos Néstor Kirchner y Gasoducto Norte. Estos oleoductos podrían transportar alrededor de 15 millones de metros cúbicos por día hacia el norte. Por su parte, la Agencia Nacional de Petróleo (ANP) de Brasil autorizó a TotalEnergies a importar hasta 20 millones de metros cúbicos diarios desde Argentina.
Alternativas y perspectivas a largo plazo
Aunque el tránsito a través de Bolivia ofrece una solución inmediata, se están explorando otras opciones. Entre ellas, la construcción de un nuevo oleoducto que atraviese Paraguay o conexiones directas entre Argentina y el sur de Brasil. Estas iniciativas, aún en fase de planificación, podrían garantizar un suministro fiable para las próximas décadas.
Un contexto de mercado energético en transición
Brasil busca estabilizar sus suministros como parte de su “Nuevo Mercado del Gas”, una reforma implementada en 2021. Esta iniciativa tiene como objetivo liberalizar el mercado del gas y al mismo tiempo reducir los costos para los consumidores. Sin embargo, la falta de infraestructura para exportar gas marino y la lentitud en la regulación han obstaculizado hasta ahora el progreso.
Producción Nacional y Nuevos Desarrollos
Pese al récord de producción alcanzado en septiembre de 2023 con 169,9 millones de metros cúbicos diarios, gran parte del gas extraído en Brasil se reinyecta para mejorar la recuperación del petróleo. Sólo 54,4 millones de metros cúbicos por día están disponibles para la venta comercial.
Sin embargo, nuevos proyectos como el Complexo Energias Boaventura, recientemente inaugurado cerca de Río de Janeiro, podrían aumentar la oferta interna. El sitio está diseñado para procesar hasta 21 millones de metros cúbicos por día provenientes de campos marinos.
Desafíos a corto y largo plazo
Las importaciones de Argentina representan una solución inmediata para Brasil, pero los retrasos en varios proyectos marinos importantes, como el desarrollo de los campos Raia Manta y Raia Pintada por Equinor, corren el riesgo de mantener la dependencia de los suministros externos.
Asimismo, Petrobras pospuso hasta 2030 o más allá el desarrollo de su proyecto de aguas profundas Sergipe-Alagoas, que aún podría producir hasta 18 millones de metros cúbicos por día. Estos retrasos resaltan la urgencia de que Brasil garantice soluciones de suministro alternativas en el corto plazo.