La remodelación de la plaza del 30 de Octubre, en Dijon, está en el centro de una auténtica polémica. Tres meses después de finalizar las obras, las promesas no parecen cumplirse. El grupo Agir pour Dijon, en un comunicado de prensa reciente, destaca las numerosas dificultades que afectan a los usuarios y residentes de este lugar estratégico de la ciudad.
Atascos monstruosos y conductores frustrados
La principal queja se refiere a la capacidad de la nueva rotonda para absorber el tráfico rodado. Según la observación del grupo Agir pour Dijon, el diseño actual no responde a las necesidades de los automovilistas, lo que provoca grandes atascos en las vías situadas aguas arriba de la plaza, en particular en los bulevares Carnot y Voltaire. Algunos días de la semana la situación se vuelve caótica, lo que obliga a muchos conductores a evitar la plaza y tomar rutas alternativas no previstas para este tipo de tráfico. Resultado: trayectos más largos y calles vecinas congestionadas.
Autobús retrasado, pasajeros a pie
Los problemas no terminan ahí. La remodelación tampoco parece adecuada para los autobuses Divia, cuya longitud plantea problemas al cruzar la plaza. Frecuentemente atrapados en atascos, los autobuses acumulan retrasos, lo que afecta los horarios y la satisfacción de los usuarios. En algunas situaciones, los pasajeros incluso se vieron obligados a bajarse y continuar su viaje a pie.
Infraestructura inadecuada para ciclistas y peatones
La zona peatonal, aunque reorganizada para una mayor convivencia, también presenta defectos notables. La arena utilizada para el suelo plantea un problema particular para las personas con movilidad reducida y, al ser dispersada por las pisadas de los peatones, cubre en ocasiones los carriles bici. Esto ya ha provocado la caída de ciclistas, volviendo el lugar peligroso para los usuarios más vulnerables.
Una lamentable falta de consulta
El grupo Agir pour Dijon recuerda que es lamentable que no se hayan tenido en cuenta las advertencias expresadas durante la reunión con los vecinos en la Sala de Flore. A pesar del considerable coste del proyecto, estimado en 1,8 millones de euros, parece que se cometieron errores de diseño y ejecución por falta de consulta previa.
Cambios urgentes a considerar
Ante las dificultades vividas desde el final de las obras, el grupo pide al ayuntamiento que actúe rápidamente. Entre las modificaciones necesarias, Agir pour Dijon propone, en particular, ampliar los carriles de circulación para facilitar la circulación, así como una estabilización más eficaz de la superficie peatonal para mejorar la accesibilidad.
Para el grupo Agir pour Dijon, la observación es clara: es hora de aprender de estos errores y corregir los defectos de esta remodelación para encontrar un lugar funcional y agradable, que responda a las expectativas de los usuarios de Dijon.
Comunicado de prensa del 26 de noviembre de 2024:
Plaza 30 de Octubre: ¡necesitamos revisar el ejemplar!
La remodelación de la Place du 30 Octobre no cumple todas sus promesas. Desde el final de la obra y el inicio del curso escolar, las decepciones se han acumulado y los usuarios se han desilusionado. La capacidad de absorción del tráfico rodado por la nueva rotonda es claramente insuficiente en relación a los flujos. Esto provoca atascos monstruosos algunos días de la semana en las calles situadas más arriba de la plaza, en particular en los bulevares Carnot y Voltaire.
Es una lotería a la que los automovilistas ya no quieren jugar, negándose a pasar por esta plaza y tomando rutas alternativas, con trayectos más largos por calles no habilitadas para este fin. El espacio no es adecuado para las dimensiones de los autobuses Divia, que a menudo se encuentran atrapados en atascos y con retrasos en sus horarios. Los pasajeros se ven obligados a bajarse de los autobuses para continuar a pie.
La arena de la zona reservada a los peatones no es adecuada para las personas con movilidad reducida y cubre peligrosamente los carriles bici, provocando caídas de los ciclistas. Es lamentable que no se hayan tenido en cuenta las advertencias expresadas durante la reunión con los vecinos en la Sala de Flore, presidida en aquel momento por el primer diputado.
A pesar del coste del proyecto, 1,8 millones de euros, hay que admitir errores de diseño y construcción, y falta de consulta previa. Tres meses después, ha llegado el momento de sacar conclusiones de estas repetidas observaciones. Son necesarias modificaciones, incluida la ampliación de los carriles de circulación y la estabilización de la superficie.