Desaparecido después de fingir que se ahogó en un lago de Wisconsin, Ryan Borgwardt fue encontrado sano y salvo en Europa del Este tres meses después. Detrás de esta puesta en escena, un plan minucioso y motivaciones aún poco claras.
“Buenas noticias: sabemos que está vivo y sano”, dijo el sheriff del condado de Green Lake, Mark Podoll, en una conferencia de prensa. El hombre en cuestión, Ryan Borgwardt, está casado y tiene tres hijos.
En agosto, se descubrió un kayak volcado en Green Lake. A pesar de una intensa búsqueda que duró siete semanas, no se encontró ningún cuerpo. Sólo se recupera el coche, el juego de llaves, la cartera y el billete de transporte del propietario. Hoy el enigma está aclarado.
“La mala noticia es que no sabemos exactamente dónde está Ryan y aún no ha decidido volver a casa”, continuó el sheriff. El caso está cubierto por CNN y varios medios estadounidenses.
Un plan orquestado hasta llegar a Europa
Según el ayudante del sheriff Matthew L. Vande Kolk, Ryan le dijo a su familia que iba a pescar. Supuestamente llegó al lago en una bicicleta eléctrica, volcó su kayak y luego llegó a la orilla en un bote de goma para niños, abandonando su teléfono en el agua.
Al anochecer, viajó 80 millas hasta Madison en una bicicleta eléctrica, tomó un autobús a Detroit, cruzó la frontera canadiense y luego tomó un vuelo a Europa.
El 11 de noviembre, los investigadores finalmente lograron ponerse en contacto con él. A pesar de comunicarse con ellos casi a diario, Ryan todavía no ha hablado con su familia.
En un vídeo enviado a las autoridades la semana pasada, dice desde un apartamento: “Estoy a salvo, todo está bien”.
Motivaciones misteriosas
Antes de su desaparición, Ryan había transferido dinero al extranjero, cambió su dirección de correo electrónico e interactuó con una mujer en Uzbekistán. En enero, contrató un seguro de vida por valor de 375.000 dólares para mantener a su familia.
Los investigadores pudieron contactar con él a través de una mujer de habla rusa, pero no está claro si tiene algún parentesco con la mujer uzbeka mencionada. Sus motivaciones exactas aún no están claras. Según Vande Kolk, Borgwardt actuó por “varias razones”.
Según los informes, Ryan expresó su pesar por el dolor infligido a su familia y los esfuerzos de la comunidad por encontrarlo. Ahora le gustaría “devolver y reparar el daño causado”.
Cuentas a dar
Su desaparición movilizó importantes recursos financieros y humanos. Las autoridades planean exigirle responsabilidades y exigirle hasta 40.000 dólares para cubrir los costes de la investigación.
Ryan pensó que la búsqueda terminaría después de dos semanas. Pero, como dice Vande Kolk, “se topó con el sheriff equivocado y el departamento equivocado”.
Su familia espera su regreso, sobre todo ahora que se acercan las vacaciones de Navidad. “¿Qué mejor regalo para sus hijos que su presencia?”, concluye el sheriff.