Los decepcionantes indicadores económicos y las tensiones políticas europeas están pesando fuertemente sobre la moneda única, allanando el camino para una nueva perspectiva preocupante para el euro.
El euro tambalea frente a un dólar más poderoso que nunca. Impulsada por indicadores económicos decepcionantes en la zona del euro y una situación política tensa, la moneda única ha alcanzado su nivel más bajo en dos años. Esta situación alimenta la especulación sobre una posible caída por debajo de la paridad con el dólar, un escenario que podría remodelar los equilibrios financieros globales.
Un contexto económico y político desfavorable para el euro
Desde hace varias semanas, el euro muestra signos de debilidad frente al dólar. Este viernes, la moneda europea alcanzó un umbral histórico de 1,0335 dólares, su nivel más bajo desde noviembre de 2022. La caída fue precipitada por una serie de indicadores económicos mixtos en la zona euro, que reflejan una bajo presión económica.
Entre estos indicadores, los índices PMI, que miden la actividad en los sectores industrial y de servicios, mostraron una caída significativa. El índice compuesto, que cayó a 48 en octubre, indica una contracción, muy por debajo de las expectativas de los economistas. Estas cifras, asociadas a una revisión a la baja del crecimiento del PIB alemán para el tercer trimestre según BFM BOURSE, refuerzan las preocupaciones sobre la salud económica de la zona del euro.
El papel de las políticas monetarias divergentes
Al mismo tiempo, las políticas monetarias de los bancos centrales desempeñan un papel clave en esta dinámica. Si bien el Banco Central Europeo puede considerar recortes de tasas para apoyar una economía debilitada, la Reserva Federal de Estados Unidos mantiene las tasas altas. Esta divergencia fortalece el atractivo del dólar entre los inversores.
Los rendimientos de los bonos europeos también están cayendo, un fenómeno que está aumentando la presión sobre el euro. Por ejemplo, los rendimientos de los bonos alemanes a 10 años disminuyeron hasta el 2,257%, lo que refleja un clima de cautela entre los inversores.
La influencia del contexto político internacional
Más allá de los datos económicos, las tensiones políticas en Europa y en todo el mundo están pesando sobre la confianza del mercado. Las incertidumbres vinculadas a la estabilidad política en Francia y Alemania se suman a los impactos de las recientes elecciones presidenciales en Estados Unidos. La elección de Donald Trump, percibida como favorable al dólar, agrava la debilidad del euro.
Las políticas proteccionistas previstas por la administración estadounidense, en particular el aumento de los derechos de aduana sobre las importaciones chinas, están contribuyendo a fortalecer el dólar. Como resultado, los economistas predicen una continua caída del euro, y algunos incluso predicen una caída por debajo de la paridad con el dólar en los próximos meses.
¿Paridad a la vista?
Las perspectivas para el euro siguen siendo sombrías. Varios analistas, incluidos los de Capital Economics, prevén que la moneda europea podría caer hasta el dólar, o incluso menos, a finales de 2025. El Deutsche Bank va aún más lejos y estima que el euro podría alcanzar los 0,95 dólares si se mantienen las políticas económicas estadounidenses. sin alterar.
La combinación de indicadores económicos decepcionantes, tensiones políticas y políticas monetarias divergentes está ejerciendo presión sobre el euro. A medida que el dólar continúa fortaleciéndose, la idea de la paridad entre las dos monedas ya no es un escenario improbable, sino una posibilidad inminente.