El euro cayó a su nivel más bajo en dos años frente al dólar el viernes y la libra retrocedió, ambos socavados por índices de actividad económica de noviembre inferiores a lo esperado que reforzaron las expectativas de recortes de tasas por parte de sus bancos centrales.
Alrededor de las 11:35 horas, la moneda europea cayó un 0,45% frente al dólar, hasta 1,0426 dólares por euro, después de caer más fuertemente un 1,32% hasta 1,0335 dólares, su nivel más bajo desde finales de noviembre de 2022 frente al dólar. La moneda europea también perdió terreno frente al franco, situándose en 0,925 francos.
También lastrada por un índice de actividad, la libra cayó un 0,47% frente a la moneda estadounidense, hasta 1,2529 dólares, después de haber tocado 1,2487 dólares, su nivel más bajo desde mayo. Las dos monedas sufren una divergencia entre las políticas monetarias de sus bancos centrales y la de la Reserva Federal (Fed), que se espera sea más firme de lo previsto desde que Donald Trump ganó las elecciones presidenciales el 5 de noviembre en Estados Unidos.
La actividad del sector privado en la zona del euro se contrajo en noviembre, a 48,1, después de 50 en octubre, según el PMI preliminar publicado el viernes por S&P Global. Calculado sobre la base de encuestas empresariales, cayó a su nivel más bajo en 10 meses, y por debajo de las expectativas de los economistas. Un número por encima de 50 indica un crecimiento de la actividad, mientras que un número por debajo refleja una contracción.
“Los datos de la eurozona han aumentado la probabilidad de nuevos recortes de tipos por parte del Banco Central Europeo (BCE) el próximo año”, resume Kathleen Brooks de XTB. Si el mercado ya estaba “seguro de que el BCE reducirá sus tipos el próximo mes”, ahora prevé una reducción de medio punto porcentual, añade el analista.
En el Reino Unido, la actividad del sector privado cayó al nivel más bajo en más de un año, hasta 49,9 en noviembre, frente a 51,8 el mes anterior, según el PMI preliminar, cifra también inferior a las proyecciones.
Como resultado, “las expectativas de un recorte de tipos en la reunión de diciembre” del Banco de Inglaterra (BoE) han aumentado, al igual que las expectativas de nuevos recortes en 2025, señala la señora Brooks.
Para el Banco de Inglaterra, “la cuestión clave ahora será evaluar si el potencial impacto inflacionario de los aumentos de impuestos” previstos en el reciente presupuesto británico “compensa la debilidad de la demanda”, afirma Sanjay Raja, analista del Deutsche Bank.
Por su parte, el bitcoin alcanzó los 99.505,45 dólares el viernes, antes de caer a 98.712 dólares alrededor de las 12:20 horas, pisándole los talones al tan esperado umbral de los 100.000 dólares. La criptomoneda más capitalizada sigue aprovechando la ola de entusiasmo en el sector generada por la elección de Donald Trump.
/ATS