Teresa Ribera, ministra española para la Transición Ecológica y candidata a comisaria europea, defendió el miércoles la actuación de los servicios que lanzaron las alertas el día de las mortíferas inundaciones del 29 de octubre, juzgando “peligroso” ponerlas en duda .
“Quiero saludar aquí el trabajo y la dedicación de los funcionarios que emitieron la información, como era su deber”, declaró la ministra ante el Congreso de los Diputados de España, al considerar las críticas dirigidas a ellos “profundamente injustas y profundamente peligrosas”.
Ajuste de cuentas en Bruselas
Desde la catástrofe que dejó al menos 227 muertos según un último informe, el ejecutivo regional derechista de Valencia y el Gobierno central del socialista Pedro Sánchez atacan sus respectivos papeles en la gestión de la alerta y el socorro, muy criticados por las víctimas .
La polémica ha llegado a Bruselas, donde la derecha bloquea el nombramiento de Teresa Ribera como comisaria europea, por iniciativa del Partido Popular español, que exigió responsabilidades por estas mortíferas inundaciones.
“La experiencia demuestra que la alerta temprana constituye la capacidad real para hacer frente a fenómenos de fuertes precipitaciones y aumentos repentinos del caudal” de los ríos, dijo también el ministro a los diputados.
Carlos Mazón, presidente de la Comunidad Valenciana, muy criticado desde la catástrofe, reconoció recientemente “errores”, al tiempo que criticó los servicios dependientes del Estado central, y en particular la alerta roja activada por la mañana por la Agencia Meteorológica Nacional, afirmando que este tipo de alertas “se produjeron 36 veces durante los últimos 10 años sin que ninguna de ellas fuera seguida por inundaciones repentinas como las” del mes pasado.
Ningún estado “fallido”
“En los últimos cinco años, sólo una alerta de 400 por fuertes lluvias y riesgo de inundaciones se ha emitido en nivel rojo”, respondió el miércoles Teresa Ribera, en referencia a “el aviso más relevante (…) para poder responder con antelación e identificar los medios más adecuados para proteger a la población. “Pero de poco sirve tener toda la información necesaria si quien tiene que responder no sabe cómo hacerlo”, añadió Teresa Ribera.
“No vivimos en un Estado fallido, vivimos en un Estado de derecho y tenemos servicios públicos que funcionan para proteger a la población y que todos debemos respetar, valorar y fortalecer, porque el conocimiento, la ciencia y la confianza en las instituciones son nuestro mejor aliados ante el riesgo”, concluyó el ministro, en respuesta a las numerosas críticas dirigidas a las autoridades desde las inundaciones.