Mientras creía haber encontrado “postales”, el conservador de un museo de Madrid se dio cuenta, tras una larga investigación, de que había conseguido fotografías tomadas en privado por una pareja española que se unió en julio de 1922.
Un descubrimiento excepcional fruto del azar. En 2017, mientras preparaba una instalación temporal en el Museo Nacional de Artes Decorativas de Madrid, el artista y curador David Tullo recibió una misteriosa maleta sellada que no había sido abierta en 80 años, informa The Guardian. En su interior se encontraron, entremezclados, objetos domésticos, ropa, artículos de tocador, fotografías tradicionales… pero también fotografías que podrían asociarse, en la época contemporánea, a contenidos pornográficos.
Sin posibilidad de rastrear la identidad del propietario original ni de su familia, el objeto se mantuvo intacto en el Ministerio de Hacienda, para respetar el plazo suficiente impuesto por la burocracia española. Este sorprendente conjunto es ahora objeto de una exposición titulada “Álbum de Salón y Alcoba”, en el marco de “Photoespaña”, el certamen anual de la fotografía madrileña.
“en 1936 pasó algo y empacaron todo”
Aunque no se pudo establecer la identidad de esta pareja, a pesar de un año de investigación, el conservador del museo logró establecer la fecha de la unión de los amantes como el 29 de julio de 1922, gracias a un certificado de matrimonio con fotografía en el que estaba inscrito. Esta fotografía, detrás de la cual se escondían las fotografías eróticas, también había sido realizada por Antonio Cánovas del Castillo y Vallejo, conocido como Kaulak. Información que permitió al aspirante a investigador afirmar que el hombre y la mujer estaban relativamente acomodados, dado que el fotógrafo era uno de los más populares del Madrid de la época, por su innegable talento como retratista. “Todos querían tener su retrato de Kaulak”, aseguró David Tullo a los medios.
Pero antes de comprender que esas fotografías habían sido tomadas en la intimidad conyugal, el conservador del museo pensó que se trataba de “una colección de postales eróticas”. Al mirar las fotografías, David Tullo también se dio cuenta de que el marido también se estaba travestindo al posar junto a su esposa. Una originalidad que, según él, no es necesariamente originalidad: “En el contexto de la época, los años 1920 y 1930, todos los roles de género comienzan a colapsar”, explicó el artista-comisario.
Según él, la pareja, que probablemente disponía de un cuarto oscuro para revelar sus propias fotografías, desapareció apresuradamente en 1935, durante la Guerra Civil española. “Mi teoría, que es sólo una teoría, es que en 1936 pasó algo y lo empaquetaron”, conjeturó. Pero han resurgido huellas de esta historia pasada. Ya podrán ser admiradas por los visitantes del Museo Nacional de Artes Decorativas de Madrid hasta el 22 de septiembre de 2024.
