El informe de la Comisión advierte sobre incendios forestales cada vez más frecuentes e intensos.
El año pasado, Europa, Oriente Medio y África sufrieron algunos de los peores incendios forestales desde el año 2000. Según un informe sobre incendios forestales, publicado este martes 19 de noviembre por el Centro Conjunto de Investigación de la Comisión Europea, estos incendios afectaron más de 500.000 hectáreas de terreno naturalaproximadamente la mitad del área de la isla de Chipre.
“En los últimos años, se han producido frecuentes incendios forestales en Europa y los países vecinos, y 2023 no fue la excepción”. En agosto, un megaincendio al norte de Atenas dejó una veintena de muertos. “Se trata del mayor incendio forestal registrado en la UE desde que el Sistema Europeo de Información sobre Incendios Forestales (EFFIS) comenzó a registrarlos en el año 2000”, subraya la Comisión.
Incendios forestales más frecuentes e intensos
Según el informe, estos incendios demuestran “los efectos innegables” del calentamiento global en el aumento de la frecuencia e intensidad de los incendios forestales.
Y añadió: “El cambio climático no sólo está aumentando el tamaño de las áreas afectadas por los incendios forestales, sino que también está haciendo que los incendios individuales sean más intensos, extendiendo la temporada de incendios más allá del período tradicional de verano y provocando incendios en áreas que normalmente no se veían afectadas.
En 2024, la Comisión también destaca que la superficie afectada por los incendios en la UE fue inferior a la media de las últimas dos décadas. “Esto se debe principalmente a las precipitaciones intermitentes que afectaron a gran parte del territorio durante la primavera y el verano”. Sin embargo, los datos apuntan a un aumento de los daños causados por estos mismos incendios.
Todo contra el calentamiento global
Alrededor del 96 % de los incendios forestales en la UE son causados por el hombre. Para combatir los incendios forestales en Europa y en todo el mundo, la Comisión recuerda que “es necesario minimizar el número de focos de incendio y gestionar el paisaje en las regiones vulnerables, en particular evitando la acumulación de combustibles de alto riesgo”.
Si bien todo apunta a un empeoramiento de la crisis climática en los próximos años, la Comisión también pide una mayor concienciación, que debe implicar a todos los sectores de la población.
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