La pobreza está aumentando en Francia, asegura el informe anual de Secours catholique publicado este jueves. Muchas personas en situaciones precarias ya no se atreven a pedir las ayudas a las que tienen derecho. “Existe un discurso ambiental que estigmatiza y empuja a los más vulnerables a renunciarexplica Didier Duriez, presidente de la asociación. Inducimos la idea de que tocar el RSA significa lucrar. » Estos beneficios sociales también suelen ser manipulados y su cuantía alimenta fantasías. ¿Cuál es la verdad?
El 36,1% de los hogares franceses elegibles no reciben el RSA y ven caer su nivel de vida medio de 698 a 211 euros al mes. En cuanto a quienes lo reciben, más del 80% mantiene ingresos por debajo del umbral de pobreza. Así, según el INSEE, las prestaciones sociales (RSA, pensiones de jubilación, prestaciones de desempleo, etc.) representan más del 60% de la renta neta disponible del 20% más pobre, frente al 25% del 20% más rico.
Para ver las cosas con mayor claridad, un informe de Drees, el servicio estadístico de los ministerios sociales, publicado en octubre, ofrece una visión general.
588€ de media
En primer lugar, el importe gastado por el Estado en 2022 en mínimos sociales es de 30.600 millones de euros, o el 3,6% del importe total de las prestaciones de protección social y el 1,2% del PIB. Luego, en términos de indemnizaciones pagadas, encontramos en particulare La Renta Activa Solidaria (RSA), la Asignación para adultos discapacitados (AAH) y la Asignación Solidaria para personas mayores (Aspa). Cada destinatario recibe una media de 588 € al mes. En detalle, 788 € al mes para la AAH, 536 € para el Asignación Específica de Solidaridad, 527 € para el RSA y 469 € para el mínimo de vejez.
Cantidades alejadas del máximo accesible y miles de euros asociados en ocasiones a estas prestaciones sociales. Así, en abril pasado, el RSA se revaluó un 4,6%. Por tanto, un beneficiario RSA recibe 635,71 € al mes y una pareja, sin dependientes, 953,56 € al mes. Para la AAH, el importe máximo para personas solteras será de 1.016 euros frente a los 971,37 euros actuales. “Aunque sumamos todos los beneficios sociales posibles, nunca ganaremos más del 70% del salario mínimo”asegura Didier Duriez.
Cantidades que también hay que tomar con cautela porque el tipo sin recurso sigue aumentando. “Ya sea producto de renuncias, miedo a ser estigmatizado, desconocimiento o dificultades para acceder a los trámites, el no recurso a las prestaciones sociales no es otro que el resultado del alejamiento de la solidaridad, producido por la propia administración”estima Catholic Relief.