Rusia atacó el miércoles la capital de Ucrania, Kiev, con una sofisticada combinación de misiles y drones por primera vez en 73 días, informaron las autoridades.
Las alertas de ataque aéreo sonaron durante horas mientras Rusia apuntaba a ocho regiones de Ucrania, disparando seis misiles balísticos y de crucero y 90 drones, informó la fuerza aérea de Ucrania.
Sus defensas aéreas derribaron cuatro misiles y 37 drones, mientras que otros 47 drones fueron detenidos mediante interferencias electrónicas. Actualmente se están evaluando los daños.
El ataque aéreo se produjo mientras la mayoría de los más de 10.000 soldados enviados por Corea del Norte para ayudar a Rusia en la guerra estaban combatiendo en la región fronteriza rusa de Kursk, según Estados Unidos. Una incursión del ejército ucraniano en Kursk hace tres meses avergonzó al Kremlin.
El ejército ruso entrenó a soldados norcoreanos en artillería, uso de drones y operaciones básicas de infantería, incluida la limpieza de trincheras, dijo el martes el portavoz adjunto del Pentágono, Vedant Patel, durante una sesión informativa.
La cooperación entre los soldados rusos y norcoreanos enfrenta desafíos, según el Pentágono, incluido cómo lograr la interoperabilidad militar y superar la barrera del idioma.
Kiev estima que Rusia ha desplegado alrededor de 50.000 soldados en Kursk para intentar desalojar a los ucranianos.
Rusia ha estado reuniendo fuerzas en los últimos meses para llevar a cabo una contraofensiva en Kursk, según el grupo de expertos Instituto para el Estudio de la Guerra, aunque se desconoce el calendario de la operación.
Los planes de Rusia en Kursk y los esfuerzos de Ucrania por contener un ataque ruso en la región de Donetsk coinciden con la incertidumbre política sobre cómo una administración estadounidense bajo Donald Trump cambiará la política de Washington sobre la guerra.
La ayuda militar estadounidense es vital para Ucrania, pero Trump ha señalado que no quiere seguir dando decenas de miles de millones de dólares a Kiev.
El presidente Joe Biden tiene la intención de intensificar el apoyo militar estadounidense a Ucrania en los últimos meses de su mandato, dijo el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
“Seguiremos reforzando todo lo que hacemos por Ucrania para garantizar que pueda defenderse eficazmente contra esta agresión rusa”, aseguró Blinken durante una rueda de prensa en la sede de la OTAN.
Blinken advirtió que la decisión de Corea del Norte de enviar sus tropas a operaciones de combate junto con las fuerzas rusas “exige y recibirá una fuerte respuesta”. No dio más detalles.
