“Se implementarán medidas”. El Ministerio de Asuntos Exteriores recibió este martes por la mañana en el Quai d’Orsay a Joshua Zarka, embajador de Israel en Francia. Este último fue citado en relación con el incidente diplomático ocurrido en el hotel Eléona de Jerusalén el pasado jueves. La policía israelí había entrado en esta zona gestionada por París en Jerusalén desde el siglo XIX y dos gendarmes franceses fueron detenidos, todo ello mientras el ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Noël Barrot, se encontraba en Israel.
Durante esta citación, Joshua Zarka fue informado “de que la presencia de seguridad armada israelí en la finca de Eléona, así como la detención de dos gendarmes del Consulado General de Francia en Jerusalén, con estatus diplomático, son inaceptables”, indica el Quai d ‘Orsay en un comunicado enviado a la prensa el martes por la tarde.
Estos hechos son tanto más reprobables cuanto que se refieren a “dos países que mantienen una fuerte relación bilateral y en el marco de una visita destinada a reducir las tensiones”, añade el Ministerio de Asuntos Exteriores. “Se tomarán medidas para garantizar que tales actos no se repitan”, concluye el comunicado.
El jueves pasado, la policía israelí entró “armada” y “sin autorización”, según Jean-Noël Barrot, en los terrenos del dominio nacional Eléona, propiedad de Francia desde el siglo XIX y situado en el Monte de los Olivos, en Jerusalén Este. Tras la partida del ministro, dos gendarmes fueron arrestados y detenidos por las autoridades israelíes antes de ser liberados.
La diplomacia israelí, por su parte, aseguró que las cuestiones de seguridad habían sido “aclaradas” previamente con la embajada de Francia en Tel Aviv. La presencia de personal de seguridad israelí tenía “el objetivo de garantizar (la) seguridad” de Jean-Noël Barrot, afirmó el Ministerio de Asuntos Exteriores israelí en un comunicado.
