Carlos III estaba en Balmoral cuando su madre, la reina Isabel II, murió pacíficamente a la edad de 96 años el 8 de septiembre de 2022. El certificado oficial de defunción de Isabel II indica que ella es
Murió a las 15:10 horas.hora acordada por el Dr. Douglas Glass con Sir Edward Young, secretario privado de la difunta Reina.
El día de la muerte de su madre, Carlos III se escabulló por unos momentos, dice el autor real Robert Hardman. en su libro Carlos III: Nuevo rey. Nuevo Tribunal. La historia internacitado por El espejo En su artículo del 5 de noviembre de 2024, Hardman confiesa que el rey de Inglaterra fue a los terrenos cercanos de Birkhall para recoger setas.
Carlos III: Isabel II muere mientras recogía setas
Mientras Carlos III recogía setas, su esposa, la reina Camila, salía a pasear. Aproximadamente a las 3 p. m. del 8 de septiembre de 2022, se solicitó al Dr. Douglas Glass, boticario de la casa de Su Majestad, que se presentara de inmediato ante la Reina. Princesa Ana que permaneció al lado de la cama de Isabel II
Luego contactó a Charles para decirle que regresara.
Cuando el médico llegó a Balmoral alrededor de las 15:25, la Reina parecía haber dejado de respirar, menciona el medio británico. El espejo. El Dr. Glass confirmó que Isabel II efectivamente había muerto. La hora de la muerte fue fijada a las 15.10 horas por el médico y secretario privado de Isabel II.
crédito de la foto: Bestimage Incluso desconsolado, el marido de Camilla no deja de consolar al secretario privado de la Reina
Carlos III: el rey de Inglaterra consuela al secretario privado de Isabel II
En una nota, Sir Edward escribió: “Muy pacífico. Mientras duerme. Ella se desmayó. Ella no se habría dado cuenta de nada. sin dolor“sobre la muerte de Isabel II. Sir Edward se había puesto en contacto con el rey Carlos III para informarle él mismo de la muerte de la reina.
“Después de ser llamado ‘Su Majestad’ por
la primera vezCharles simplemente dijo ‘Ya casi llegamos’ y continuó hasta el castillo.“, confía Hardman en su libro. Cuando el secretario privado de la difunta reina preguntó a Carlos III con qué nombre reinaría, se sorprendió al descubrir que éste también lo consolaba.