“La situación en el campo de batalla es evidente, es una derrota militar” para Ucrania, afirmó el viernes antes de recibir a los jefes de Estado y de Gobierno de los 27, reunidos en Budapest para una cumbre informal. Donald Trump “odia la guerra” y por eso, “para nosotros, los europeos, la situación está evolucionando”, añadió en la radio húngara.
Y para el líder húngaro, que pide un alto el fuego, sólo hay una manera de responder: “Adaptámonos rápidamente y pasemos de la guerra a la paz”. El multimillonario estadounidense, que prepara su regreso a la Casa Blanca a finales de enero, prometió durante su campaña poner fin a la guerra en Ucrania en “24 horas”, sin especificar cómo pensaba hacerlo.
“Apoyo inquebrantable a Ucrania”
Pero otros líderes europeos no están dispuestos a renunciar a su apoyo, en momentos en que el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky denuncia cualquier concesión a Rusia como “suicida”. El presidente francés, Emmanuel Macron, y el primer ministro polaco, Donald Tusk, emitieron el viernes una declaración conjunta en la que reafirmaron su “determinación de brindar apoyo inquebrantable a Ucrania y al pueblo ucraniano”.
También “acordaron mantener y reforzar su apoyo con el objetivo de derrotar la guerra de agresión rusa”, según este texto. Pero para Viktor Orbán, el frente europeo se está resquebrajando. “Aumenta el número de los que guardan silencio, donde antes hablaban más, aumenta el número de los que son cautelosos y también aumenta el número de los que se preguntan si tal vez deberíamos adaptarnos a la nueva situación. aumentando”, aseguró.
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