Desaparición
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Torturada por la Gestapo, actriz en la Liberación de París, perseguida por la OEA, reportera durante la guerra de Vietnam… La luchadora de la resistencia y poeta de izquierda no dejó nunca, hasta su último aliento, de luchar y testificar. Murió el miércoles 6 de noviembre a la edad de 100 años.
“En las paredes hay gritos / Palabras grabadas con un clavo. / Oh desesperación, o esperanza loca / De los que murieron antes que yo… / Siento que todavía están ahí / A mi alrededor, mirándome”. A principios de agosto de 1944, Madeleine Riffaud, “Rainer” por ser luchadora de la resistencia, fue encarcelada en Fresnes. Unos días antes, mató a un oficial alemán, porque eran órdenes y porque quería vengar a un camarada. Fue capturada y desde entonces ha sido torturada por la Gestapo. En su celda, en los raros momentos de calma, la joven escribe poemas, con un lápiz que le regaló un carcelero, en los márgenes de una copia de la imitación de jesucristo. Evoca los abusos sufridos, los que murieron, los gritos que escucha en las noches, las ratas que pasan frente a ella, el perdón que debe concederse al enemigo, “Esos mañana me matarán. No los mates a su vez / Esta noche mi corazón no es más que amor”. Ella se está preparando para morir. No sabe que sobrevivirá y participará heroicamente, a finales de ese mismo mes, en la Liberación de París, mientras celebra su vigésimo cumpleaños. Luego dirá (1): “No aceptamos impunemente su muerte y tenemos que empezar de nuevo. Ser sobreviviente fue difícil para mí porque estaba enferma, tanto en mi mente como en mi cuerpo”.
Madeleine Riffaud, fallecida el miércoles 6 de noviembre en la madrugada, a los 100 años, dos meses y pocos días, fue una de las últimas combatientes de la resistencia en
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