Puede que el gobierno español saque adelante su plan de emergencia de 10.000 millones de euros, pero nada consolará a las familias de la región de Valencia. Desfigurada por impresionantes inundaciones, la región del este de España sigue llorando a sus muertos. El martes por la tarde, el informe mostraba 219 personas muertas a causa del mal tiempo que azota la zona desde el 29 de octubre. Una cifra que probablemente aumente a medida que pasa el tiempo y disminuye la esperanza de encontrar personas desaparecidas. Hasta el martes por la noche, las oficinas conjuntas de la policía científica y las fuerzas de seguridad habían registrado 89 casos de personas desaparecidas. Es la primera vez desde el desastre que la Audiencia Regional de Valencia menciona un número de personas desaparecidas.
En Torrent, localidad situada muy cerca de la capital comarcal, los vecinos buscan desesperadamente el rastro de dos niños de 3 y 5 años. Según TF1, las fotografías de los dos jóvenes desaparecidos estaban pegadas por todas partes. Aquí, una camioneta supuestamente fue arrojada contra la pared de la casa de esta familia, llevándose a los dos niños llamados Rubén e Izan. “Hay pocas posibilidades de que todavía encontremos personas con vida. Cuando veamos la magnitud del desastre…”, dijo un rescatista a nuestros colegas.
Ante la magnitud del desastre, el Gobierno español se comprometió a activar “ayudas directas a los ciudadanos y empresas afectadas, como hicimos durante la pandemia, con el menor papeleo posible y lo más rápido posible”, declaró después el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. el Consejo de Ministros. El ejecutivo y el gobierno de Valencia, la región más afectada por las inundaciones, son objeto de fuertes críticas por su gestión de la catástrofe. “Aún quedan personas por localizar, casas y comercios destruidos, enterrados bajo el barro”, recordó el Primer Ministro, que criticó los “discursos irresponsables” de los escépticos del clima, ante la catástrofe que afectó a la región. “El cambio climático mata”, insistió.
España pide ayuda a Europa
Asegurándose de que el gobierno estaba junto a los afectados, Sánchez anunció ayudas directas para 30.000 empresas y 65.000 trabajadores autónomos. Precisó además que el Estado cubrirá el 100% de los gastos urgentes que incurran los municipios para ayudar a sus ciudadanos y despejar las calles. “La inversión total de todas estas primeras medidas” superará los “10.600 millones de euros”, indicó Pedro Sánchez, precisando que había “solicitado formalmente” ayuda al Fondo Europeo de Solidaridad a Bruselas.
Sobre el terreno, la situación sigue siendo, sin embargo, muy complicada, sobre todo en Paiporta, ciudad de 25.000 habitantes en las afueras de Valencia, considerada el epicentro de la tragedia, con más de 70 víctimas. El martes volvió el agua potable, pero las calles seguían atascadas de vehículos.