El ejército israelí reveló el domingo por la tarde los detalles de una operación secreta que condujo a la captura de Ali Soleiman al-Assi, un agente iraní, en territorio sirio, cerca de Quneitra. Esta revelación se produce en un contexto de crecientes tensiones con Irán. Según información obtenida por Ynet y Yedioth Ahronoth, la unidad de élite Egoz llevó a cabo una redada nocturna cuidadosamente planificada hace varios meses en la casa de al-Assi. La operación se llevó a cabo en presencia de su familia, lo que requirió extrema discreción para evitar cualquier alerta de las fuerzas de Hezbollah y del ejército sirio estacionados en las cercanías.
Los comandos israelíes sacaron a su objetivo de su cama en cuestión de minutos, neutralizando cualquier posibilidad de resistencia. Un investigador de la unidad de inteligencia militar 504, presente en el lugar, confirmó la identidad del sospechoso antes de su traslado a Israel, combinando transporte terrestre y avance a pie.
Durante su interrogatorio, al-Assi reveló los métodos operativos de las redes iraníes cerca de los Altos del Golán. Un ciudadano sirio que reside en la región de Saida, recopiló información de inteligencia sobre los movimientos de las tropas israelíes a lo largo de la frontera. “Me dijo que teníamos que trabajar con ellos, observar las fronteras”, dijo sobre su reclutador iraní.
El ejército israelí destacó que esta captura ayudó a frustrar futuros ataques y desmantelar las redes de espionaje iraníes en la región. Esta operación forma parte de una serie de acciones llevadas a cabo por las FDI para contrarrestar la influencia iraní, particularmente después de una reciente intervención en el Líbano que resultó en la captura de un agente de Hezbolá especializado en operaciones marítimas.
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