La compañía francesa aplica ahora un aumento del impuesto de solidaridad a los billetes de avión para los vuelos a partir de enero de 2025, a pesar de una enmienda aún en discusión en el Parlamento. Una iniciativa que suscita descontentos y cuestionamientos entre clientes y actores del sector.
Air France-KLM no espera la votación del presupuesto
Air France-KLM ha tomado la decisión sin precedentes de aumentar los precios de los vuelos operados a partir del 1 de enero de 2025, trasladando inmediatamente el aumento del impuesto de solidaridad sobre los billetes de avión. Esta medida, anunciada en un comunicado del grupo el 24 de octubre, se hace eco del proyecto de ley de finanzas para 2025, que prevé un aumento significativo de este impuesto para reforzar la financiación de las infraestructuras de transporte, incluido el ferrocarril.
A partir de entonces, a los pasajeros que compren un billete para el próximo año se les cobrará un impuesto adicional, incluso si la enmienda aún no se ha votado. En concreto, el impuesto de solidaridad, creado en 2006 para apoyar a los países en desarrollo, aumenta de 2,63 a 9,50 euros para los vuelos en clase económica dentro de la Unión Europea.
En viajes de larga distancia, como París-Nueva York en clase business, el impuesto asciende a 120 euros. Air France-KLM justifica esta decisión por la necesidad de evitar pérdidas financieras en caso de una rápida aplicación de la ley. “ En caso de modificación, abandono o rechazo de la modificación, nos comprometemos a reembolsar el excedente recaudado. », especifica la empresa.
Esta anticipación por parte de Air France-KLM despierta la ira de los pasajeros, y algunos piden un boicot en las redes sociales. “ ¿Por qué anticipar un impuesto que ni siquiera ha sido votado todavía? » exclama un internauta, resumiendo el sentimiento general de incomprensión. El descontento también es palpable entre los profesionales del turismo: Valérie Boned, presidenta de las Compañías de Viajes (EDV), y René-Marc Chikli, presidente de la Unión de empresas de touroperación (Seto), criticaron duramente a Air France en una carta dirigida a la dirección. Critican al grupo por no haberles informado con antelación, y por “ crear confusión » aplicando un impuesto que aún es incierto.
Financiación impugnada y perspectivas de futuro del sector
Esta iniciativa se produce en un contexto de presión financiera para las aerolíneas, mientras El gobierno espera generar mil millones de euros adicionales gracias a este impuesto, incluidos 850 millones procedentes de vuelos comerciales regulares.. La justificación del Ministro de Transportes, François Durovray, sin embargo, no alivió las tensiones. En una reciente declaración a La Tribune, considera que este impuesto es “asequible”, estimando que 9,50 euros para un vuelo intraeuropeo o 120 euros para un transatlántico en clase business son cantidades “equilibradas”. Sin embargo, esta posición divide, sobre todo porque el Estado sigue siendo el accionista mayoritario de Air France-KLM.
La decisión de Air France-KLM plantea una cuestión más amplia sobre el impacto de los impuestos a la aviación en Francia. En medio de una transición ecológica, el gobierno apuesta por un aumento de los impuestos al transporte aéreo para cubrir el déficit presupuestario, apuntando también a sectores como las grandes empresas y los ingresos altos. Sin embargo, este aumento del impuesto sobre los billetes de avión podría afectar en última instancia a la competitividad de las empresas francesas frente a los competidores europeos que no están sujetos a tales medidas.
Mientras continúan los debates en la Asamblea Nacional, se podría exigir al sector aéreo que negocie una aplicación más progresiva del impuesto. Para Air France-KLM, la regularización prometida en caso de rechazo de la ley sigue siendo un compromiso incierto en un contexto en el que los pasajeros y los profesionales de los viajes piden más transparencia y diálogo.