En un mes, los precios aumentaron un 0,2% en Francia, impulsados ligeramente al alza por los de la energía e incluso por los de los productos manufacturados.
Este jueves, el INSEE ha hecho públicas sus primeras estimaciones sobre la inflación para el mes de octubre en Francia. En un año, el aumento de los precios al consumo se sitúa en el 1,2%, según el informe del instituto. Una cifra casi estable respecto a la de septiembre, cuando la inflación anual se estimó en el 1,1%. “Esta cuasi estabilidad de la inflación resultaría de una desaceleración de los precios de los servicios y de una caída de los precios de la energía menos marcada en un año que en septiembre”, precisa el documento.
En un mes, los precios al consumo aumentaron un 0,2%. En septiembre cayeron un 1,2%, consecuencia del efecto de los Juegos Olímpicos, que había impulsado los precios en determinados sectores durante el verano. Entre septiembre y octubre, el “ligero aumento” está impulsado por “los precios de la energía (principalmente los de los productos petrolíferos y del gas), los precios de los productos manufacturados (en particular los de la ropa y el calzado), los precios de los servicios (en particular los del transporte) y precios de los alimentos (particularmente productos frescos)”.
1,7% en la zona del euro
Hace apenas un año, en octubre de 2023, la inflación francesa era del 4% en 12 meses, recuerda el INSEE. Desde este verano, Francia ha vuelto a caer por debajo del 2%, por primera vez desde el aumento de los precios provocado por la invasión rusa de Ucrania en 2021.
La desaceleración inflacionaria es visible en toda la zona del euro, donde el aumento interanual de los precios se estimó en un 1,7% en septiembre. Suficientes para convencer a priori al Banco Central Europeo de continuar con su política de reducción de tipos de interés, iniciada en junio.