Al menos 50 personas, “principalmente mujeres y niños”murió el viernes durante las inundaciones repentinas en la provincia de Baghlan, en el norte de Afganistán, dijo a la AFP un funcionario local. “El número de muertos hasta el momento asciende a 50 según el hospital del distrito de Baghlan-e-Markazi”afirmó Hedayatullah Hamdard, jefe de la autoridad provincial encargada de la gestión de desastres naturales, y “podría aumentar”.
“Las lluvias estacionales provocaron inundaciones repentinas y las personas que no habían podido prepararse no pudieron salvarse, razón por la cual estamos viendo tantas pérdidas”, añadió. Equipos de rescate “buscan víctimas atrapadas en el barro o bajo los escombros”volvió a decir por la noche.
Alrededor de un centenar de muertos desde mediados de abril
Desde mediados de abril, inundaciones repentinas e inundaciones ya han causado un centenar de muertos en diez provincias del país, de las que ninguna región se ha librado, según las autoridades. También han sumergido gran parte de la tierra agrícola en un país donde el 80% de los más de 40 millones de afganos dependen de la agricultura para su supervivencia.
Afganistán, que experimentó un invierno muy seco que hizo más difícil que el suelo absorbiera la lluvia, es muy vulnerable a los trastornos climáticos. Este país asolado por cuatro décadas de guerra y que se encuentra entre los más pobres del mundo es uno de los peor preparados para afrontar las consecuencias del cambio climático, según los científicos. Responsable de sólo el 0,06% de las emisiones de gases de efecto invernadero, Afganistán es el sexto país más vulnerable al cambio climático, según los científicos.