“Mi hija tiene 12 años, está en la escuela secundaria Paea y fue atacada hace unos días.
Ella se vio obligada a luchar y si no lo hacía, era ella la que recogía los pedazos. Es solo por diversión, para ver quién es más fuerte. Tuvo un desprendimiento de retina hace dos años, la operaron.
Una operación importante. Cuando vi el vídeo en el que ella golpeó a mi hija en el ojo, lloré. Fui a la comisaría, llevé a mi hija al médico primero y después le diagnosticaron un traumatismo. Como no ocurrió en la escuela, para ellos no es su responsabilidad.
” Como no ocurrió en la universidad, no es su responsabilidad.”
Fui a denunciar a la policía. Mi hija es una chica tímida, no busca problemas. El día del ataque se encerró en sí misma.
Afortunadamente conozco a mi hija, sé cómo es ella, su actitud ha cambiado desde ese día. La violencia ha aumentado, la escuela no está hecha para ir a pelear, para demostrar quién es el más fuerte.
