El hombre de 33 años, que provocó la muerte de Joseph Samson, apodado “Sonny”, de 32 años, fue presentado este domingo por la mañana ante un juez de instrucción por “asesinato en estado de ebriedad”, indica la fiscalía de Bobigny (Seine-Saint- Denis), quien solicitó su prisión preventiva. La fiscalía consideró que este hombre residente en Val-de-Marne había golpeado intencionadamente a su víctima, rechazando la teoría de un accidente invocada por el conductor. Mientras estaba bajo custodia policial, este último habría explicado que había actuado movido por el pánico.
El viernes pasado, en Le Bourget, a las 7 de la mañana, conduciendo un Audi RS3, atropelló violentamente al treintañero. Los masajes cardíacos realizados por los bomberos no lo salvaron. Debía morir poco después.
Un final trágico por una razón trivial. De hecho, el viernes por la mañana temprano, la discoteca L’Omnium cierra sus puertas. Sonny acaba de pasar la noche en este establecimiento frecuentado por la comunidad caribeña. Regresa a su vehículo, aparcado unas decenas de metros más adelante, en la rue de Verdun.
Al maniobrar, choca contra un Audi negro. Sonny se habría ofrecido a denunciar, pero el otro conductor se habría enojado. Luego supuestamente volvió a subir a su coche y condujo hacia Sonny. El shock es de una violencia rara porque la víctima será levantada en el aire, según testigos consternados.
Sonny, como lo llamaban sus allegados, era padre de dos niños pequeños. Sus amigos lo presentan como alguien a quien le gustaba la fiesta y le apasionaba el fútbol. También era una personalidad “solar” y positiva, dirían sus amigos. “Si no estabas bien, cuando lo veías te sentías mejor. »
Originario de Blanc-Mesnil, trabajó en la tienda Action de esta localidad. También estaba orgulloso de sus raíces. Nació en Francia, creció en Blanc-Mesnil, pero “era haitiano”, subrayó el viernes su mejor amigo, Tayzzi.
Prueba de su popularidad, cuando se enteraron de la tragedia, muchos conocidos acudieron el viernes al lugar de la tragedia. Estuvieron allí muchas horas mientras, a unos diez metros de distancia, detrás de una lona, la policía científica seguía tomando muestras del cuerpo de su amigo.
Respecto al presunto autor, aún se están realizando análisis para evaluar su nivel de alcohol en sangre y la posible presencia de otras sustancias.
