“Sin embargo, hicimos la misma campaña que el año pasado y enviamos cartas a residencias de ancianos, médicos coordinadores de residencias, círculos de medicina general, colegios de farmacéuticos, hospitales, etc.“, subraya Lara Kotlar.
Entonces, ¿por qué una tasa tan baja? El portavoz de Aviq ofrece varias explicaciones: “La vacunación contra el Covid aún no se ha vuelto tan común como la de la gripe. Persiste un sentimiento de desconfianza respecto a estas nuevas vacunas “que aún no han demostrado su eficacia”. Y luego, con la variante actualmente en circulación, la gente tiene la impresión de que el Covid es poco más que un resfriado… Pero vacunarse sigue siendo un gesto preventivo para uno mismo y para los demás.“.
Flandes también está bajando la guardia: el 52% de las personas de 65 años o más han recibido una dosis de refuerzo en los últimos seis meses, según el último censo de Sciensano.
El 75% de las vacunas se administran en farmacias
En Valonia, la vacunación contra el Covid es esencialmente asunto de los farmacéuticos: casi el 75% de las dosis se inyectan gratuitamente en las farmacias.
“Vacunamos principalmente al público objetivo, las personas mayores, aquellos que padecen alguna enfermedad crónica y que se sienten más expuestos que otros. El Covid se ha vuelto como la gripe, las personas menos sensibles desde el punto de vista inmunológico no ven mucho beneficio en vacunarse“, afirma Nicolas Echemement, portavoz de la Asociación Farmacéutica Belga (APB).
Si la mayoría de las inyecciones se aplican en las farmacias es principalmente por la inestabilidad de la vacuna una vez sacada de la nevera. “Al ser multidosis además intentamos organizarnos para preparar las jeringas y que se inyecten dentro del periodo de estabilidad que es de apenas unas horas.“, especifica el farmacéutico.
Un momento que complica la vacunación contra el Covid en las consultas de los médicos de cabecera.