Los amantes del mundo del automóvil reconocerán este modelo a primera vista. Sí, es una versión pequeña del icónico Ruf CTR, el rey de un vídeo de 1987 que demuestra las habilidades de conducción de Stefan Roser en Nürburgring. El coche recibió el sobrenombre de Yellowbird y, desde entonces, todo entusiasta de los coches ha soñado con uno…
En los detalles más pequeños
Dado que sólo se construyeron 29 unidades del primer Ruf CTR y su precio supera el millón, sería mejor optar por un modelo a escala. Por supuesto, existen versiones reducidas que reproducen el deportivo hasta el más mínimo detalle. Y luego está esta versión de Ritter Goods. Detrás de esta empresa se encuentra un experto en todos los oficios, Andrew Ritter, que se especializa en reproducir coches al estilo chibi japonés. Se trata de desproporcionar un poco los coches para hacerlos más “lindos”.
Eso es exactamente lo que se hizo para este Ruf CTR a escala 1/43, que, por cierto, está construido íntegramente bajo licencia. Aunque el diseño se ha manejado de forma creativa, esto no significa que no haya lugar para los detalles. Por ejemplo, los bajos completamente detallados con escape, turbos y suspensión. Incluso el interior cuenta con un velocímetro cuya aguja marca 340 km/h, la velocidad máxima del Ruf CTR Yellowbird.
Precio picante
El modelo amarillo está colocado en una bonita “vitrina” de plástico con una placa que indica más información sobre el modelo y su número de serie en la colección. Hasta el momento no hay ningún motivo para no comprar este modelo. Sin embargo, el precio corre el riesgo de frenar las celebraciones. Ritter pide unos 206 euros (incluido el envío). Además, el paquete se envía desde Norteamérica, por lo que no es seguro que pueda colocarse debajo del árbol antes de Navidad.
Entonces, ¿este Yellowbird o varios Hot Weels debajo del árbol este año?
