¿Qué especie podría reinar en la Tierra si todos los humanos desaparecieran? Es esta pregunta digna de una película de ciencia ficción la que los científicos han intentado responder. Y su respuesta es cuanto menos sorprendente: según varios expertos, son los pulpos los que podrían dominar la Tierra después de nuestra extinción. Aunque parezca poco realista, estas criaturas marinas tienen habilidades excepcionales que las posicionan para convertirse en la próxima especie de civilización, en caso de que la humanidad se extinga.
Impresionante inteligencia
Los pulpos tienen extraordinarias capacidades cognitivas. El profesor Tim Coulson, de la Universidad de Oxford, explica a El Europeo que estas criaturas se encuentran entre las más inteligentes del planeta. “Sus habilidades para resolver problemas, su capacidad para manipular objetos y camuflarse sugieren que podrían evolucionar hasta convertirse en una especie capaz de construir una civilización”declara.
Su sistema nervioso descentralizado, distribuido por sus brazos, les permite una gran autonomía y una flexibilidad excepcional, por ejemplo para coordinar sus movimientos de forma independiente y manipular objetos complejos mientras reaccionan rápidamente a diversos estímulos.
Además, su curiosidad y capacidad de aprender demuestran que tienen un potencial de desarrollo impresionante. Estos rasgos los convierten, según el científico, en serios candidatos a ocupar un lugar dominante en un mundo sin humanos.
Habilidades de adaptación únicas
Los pulpos son expertos en adaptación. Sus cuerpos flexibles les permiten sobrevivir en una amplia variedad de hábitats, desde los fondos marinos hasta las aguas costeras. También pueden respirar fuera del agua durante 30 minutos, lo que les da una clara ventaja si se altera su entorno acuático.
Según Tim Coulson, incluso es posible, con un poco de imaginación, que estas criaturas puedan desarrollar dispositivos similares a nuestros equipos de buceo para alargar su estancia fuera del agua, y así explorar nuevos horizontes.
“Los pulpos podrían, a largo plazo, desarrollar dispositivos respiratorios, como nuestro equipo de buceo, para sobrevivir fuera del agua”afirma. Aunque es poco probable que se conviertan en animales terrestres como los humanos, podrían evolucionar para cazar presas terrestres y colonizar nuevos ecosistemas.
¿Y los primates en todo esto?
Los primates han sido considerados durante mucho tiempo los sucesores naturales de los humanos. Sin embargo, Tim Coulson cree que serían tan vulnerables como nosotros a amenazas como el cambio climático. “Dependen de comunidades unidas para sobrevivir, lo que los haría menos capaces de hacer frente a un mundo perturbado”explica.
Su sistema social, aunque eficaz en un mundo estable, podría convertirse en un lastre en un entorno desestabilizado, haciéndolos menos adaptables a los cambios rápidos. Además, su lenta reproducción y su vulnerabilidad ante los depredadores limitan su capacidad para colonizar nuevos territorios. Los pulpos, por el contrario, son más independientes. No necesitan estructuras sociales rígidas para prosperar, lo que les permite adaptarse más fácilmente a situaciones imprevistas.
Estos cefalópodos también tienen la ventaja de no necesitar comunidades estrictas para sobrevivir. Su autonomía y su capacidad de evolucionar individualmente les otorgan una mayor flexibilidad ante un mundo perturbado. Esto les permitiría prosperar en un entorno donde otras especies, como los primates, tendrían dificultades para adaptarse.
¿Podrían los pulpos reemplazar a los humanos? “Absolutamente”concluye afirmativamente Tim Coulson.
