Rúben Amorim, recién nombrado director del Manchester United tras la marcha de Erik ten Hag, ya se está preparando activamente para el mercado de fichajes de invierno. Entre sus prioridades está Jarrad Branthwaite, joven central del Everton, ya seguido por los Red Devils el pasado verano.
A pesar del interés inicial del club mancuniano, la elevada valoración del Everton, estimada en 80 millones de libras (95 millones de euros), había enfriado las negociaciones. Pero con Amorim a cargo, se espera un nuevo intento este invierno. El técnico portugués, aprovechando su éxito en el Sporting CP, ve en Branthwaite, de 22 años, un potencial pilar de la defensa.
A pesar de una temporada mixta marcada por problemas físicos y sólo cuatro apariciones en la Premier League, el defensa inglés sigue siendo un talento reconocido. Su progreso, especialmente durante una exitosa cesión al PSV Eindhoven, lo convierte en un objetivo prioritario para Amorim, deseoso de consolidar una retaguardia mancuniana en dificultades esta temporada.
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