DayFR Spanish

Léa de Salon-de-Provence lucha por su pequeño Sandro y para concienciar sobre el citomegalovirus

-

Léa nos cuenta que quedó paralizada. “Mi cerebro se apagó. No podía escuchar nada de lo que me decían. Solo entendí cuando llegué a casa”. – cuando en la tercera ecografía se enteró de que el bebé tenía citomegalovirus. El shock cuando comprende que el desarrollo del cerebro se detuvo muy temprano. Y la rabia también, porque nunca no fue informada del riesgonunca le ofrecieron un análisis de sangre, a diferencia de la toxoplasmosis. Hoy no se arrepiente por nada del mundo de haber seguido adelante con su embarazo: “Lo sabía, sentí que iba a salir bien” y Sandro le da la razón cada día.

Un compromiso total

Léa dejó su trabajo de peluquera. La semana está marcada por citas saludables: musicoterapia, fisioterapia, psicomotricidad… Con su pareja, la joven madre, que debe acompañar también al mayor de 6 años, dedica su vida a la evolución de Sandro. Y Sandro lo sorprende. “Tengo fe en ti, en tu fuerza” ella escribe, notando el progreso. “A los seis meses no se volteaba del estómago a la espalda. Hoy se mueve a cuatro patas”. Sólo queda caminar para domesticar. La parte más difícil vendrá después: las interacciones sociales. Por el momento, el niño se esconde de la vista. El daño neurológico causó mucho daño.

La cruzada de Lea

Si Léa comparte Instagram su lucha con gran modestia y fotografías en blanco y negro de su vida diaria, es para avanzar en la causa. El cribado debe ofrecerse sistemáticamente. Muchos médicos lo solicitan para tratarlos en caso de infección, limita la infección del virus. Cada año se infectan 3.400 bebés provocando 500 casos de sordera. También existen medidas de barrera para las mujeres embarazadas que ya tienen niños pequeños que pueden contagiarse en la guardería o con una niñera.

La Alta Autoridad Sanitaria dará su opinión sobre este cribado a principios del próximo año.


Health

Related News :