Las proteínas de la “soledad” en tu sangre podrían comprometer tu salud y poner en riesgo tu bienestar.
Dr.
- La soledad y el aislamiento social aumentan el riesgo de enfermedad.
- Proteínas específicas están asociadas con estos sentimientos.
- Las conexiones sociales profundas mejoran la salud.
El peso de la soledad
Los seres humanos son inherentemente sociales. Prosperamos en la conexión, la comunicación y las experiencias compartidas que dan forma a nuestras identidades y fortalecen nuestro sentido de pertenencia. Sin embargo, en un mundo cada vez más digital y acelerado, los sentimientos de soledad y aislamiento social se han vuelto alarmantes. La Organización Mundial de la Salud (OMS) dijo que estos sentimientos están generalizados.
Un vínculo con la enfermedad
Los estudios muestran que están relacionados con un mayor riesgo de enfermedad y muerte.. De hecho, nuestro propio estudio encontró que el aislamiento social entre las personas mayores aumenta el riesgo de desarrollar demencia en un 26%. También descubrimos que la soledad está asociada con la depresión.
Una cuestión de proteínas
Queríamos comprender los procesos biológicos subyacentes a este vínculo entre aislamiento social, soledad y salud. Para ello, nos centramos en las proteínas, porque desempeñan un papel en la expresión genética y son una fuente importante de dianas para el desarrollo de fármacos.
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En un estudio colaborativo entre la Universidad de Cambridge y la Universidad de Fudan, descubrimos que las proteínas asociadas con la soledad y el aislamiento social también están involucradas en la inflamación, así como en las respuestas inmunes y antivirales.
Soledad y salud
En particular, nuestro estudio sugiere que la soledad puede conducir a niveles elevados de cinco proteínas específicas expresadas en el cerebro. En otras palabras, todas las proteínas que identificamos como relacionadas con la soledad estaban “asociadas positivamente”, lo que significa que las personas que se sienten solas tienden a tener niveles de proteínas más altos que aquellos que no se sienten solos.
¿Qué pensamos?
Está claro que para fomentar una sociedad próspera, debemos construir conexiones significativas entre nosotros. Las interacciones sociales son esenciales para nuestro bienestar, mejorando la salud tanto física como mental. Reducen el estrés, disminuyen la presión arterial y apoyan la función inmune. Además, pueden promover la empatía y la comprensión, fortaleciendo nuestra resiliencia emocional. Entonces, tener buenas relaciones sociales y no sentirse solo puede promover la salud al reducir los niveles de ciertas proteínas dañinas.
