En sustitución contra Argentina este viernes por la noche (21:10), el segunda línea del LOU juega en el XV francés desde el verano pasado. Descubrir a un jugador aún poco conocido pero tremendamente prometedor.
Soñó con el XV de Francia
“Un día, mamá, me verás en la televisión”. De niño, mientras veía un partido del XV de Francia, Mickaël Guillard ya prometía a su madre un futuro al más alto nivel. Para El parisino Su madre, Assiaty, confió que su hijo volvió a hablarle de esta promesa el verano pasado, cuando el Lyonnais fue convocado por primera vez para la selección francesa durante la gira en Argentina. “Estando en Argentina me preguntó si recordaba lo que me decía cuando era pequeño. Le dije: ‘Sí, por supuesto’. Y él dijo: ‘Bueno, sucedió'”. Con sólo 23 años, el natural de Trappes tiene una serie de apariciones desde el banquillo con la selección francesa, incluida una notable contra los All Blacks.
Torpe y descoordinado
Algunos tienen talento innato. Otros necesitan trabajo. Mucho trabajo. Éste es el caso de Guillard. Para Mediodía olímpico Bruno Rousserie, ex educador del internacional francés, explicó que este último presentaba deficiencias evidentes. “Era un niño que no sabía correr. Durante mucho tiempo tuvo una forma extraña de correr, como si estuviera descoordinado. También dijimos que no era muy hábil con las manos pero que tenía una fuerza increíble en los brazos”confirma Gilles Renand, director de la escuela de rugby de Maurepas-Elancourt, en parisino. Teniendo en cuenta las actuaciones del joven jugador hoy, esos días parecen ahora muy lejanos…
Educado en una buena escuela.
Mathieu Bastareaud, Judicaël Cancoriet, Yacouba Camara, Sekou Macalou, Cameron Woki, Léo Barré… La lista de jugadores que pasaron por el centro de entrenamiento de Massy o se entrenaron en él es larga. Y podemos añadir a Mickaël Guillard. Después de empezar en el rugby en el RC Maurepas-Elancourt y luego en Saint-Quentin en Yvelines, la segunda o tercera fila se unió al brillante centro de entrenamiento Massicois. Una elección inteligente para los lioneses que podrían haber elegido al Racing 92, antiguo jugador en las filas de este sólido jugador. También fue en Massy donde Guillard dio sus primeros pasos profesionales, con 14 partidos de la Fédérale 1 disputados entre 2019 y 2020.
Impresionante versatilidad
Mickaël Guillard es un jugador con un perfil poco común. Al menos, a nivel profesional. Este chico de 1m97 y 113 kilos sí que puede jugar en las dos posiciones de la segunda fila, es decir con los números 4 y 5. Mejor aún, dada su “pecho”Por su movilidad y su potencia, el natural de Trappes también puede jugar en todas las posiciones de la tercera línea (6, 7, 8). La temporada pasada, por ejemplo, y en sus 21 titularidades (con la selección francesa y con el Lyon), Guillard jugó nueve partidos en 8, ocho partidos en 5, dos en 7, además de varias inscripciones en las posiciones 4 y 6. “Del 4 al 8 sabemos que podemos contar con él”confió al entrenador del Lyon, Fabien Gengenbacher, El equipo. Una auténtica navaja suiza.
Historia conmovedora
Detrás de este coloso también hay una historia conmovedora. Su madre, de origen malgache, supo a los 23 años que nunca tendría hijos. A pesar de todos los tratamientos posibles, nada funciona. “Finalmente me decidí” ella detalló a Mediodía olímpico. Y sin embargo… Un año después, Assiaty supo – sin creerlo – que estaba esperando un hijo que nacería el 10 de diciembre de 2000 en Trappes. La relación entre madre e hijo siempre ha sido estrecha. Assiaty iba a menudo a los entrenamientos de Mickaël y lo daba todo por él.