Esta primavera, la CGN encargó a expertos independientes que determinaran el curso de los acontecimientos ocurridos el 29 de marzo, cuando el Simplon, un barco centenario, resultó dañado por una tormenta en Cully. Seis meses después de los hechos, la naviera anunció el viernes que su director de operaciones había dejado su cargo. “Él no era la persona adecuada para este puesto”, dijo la junta en una conferencia de prensa.
Además, fue llamado al orden el primer capitán, quien intervino en diversas decisiones tomadas ese día. Pero él conserva su trabajo. En cuanto al director general, Pierre Imhof, se jubilará dentro de unos meses.
En su informe, los expertos señalan que “la empresa subestimó el riesgo que representaba abandonar el barco en vista de tales condiciones climáticas”. Además, “la decisión de atracar el barco en Cully no fue revisada con la suficiente rapidez, a pesar de varias alertas”, en particular de MeteoSuisse. Anunciada pero “mal prevista”, la subida del viento provocó el desastre.
El Simplon había sufrido daños importantes. De hecho, fue necesario sacar el barco del embarcadero de Cully. Parte de su flanco derecho había sido destruido. El timón había golpeado el fondo del barco y la torsión provocada por el lago agitado había dañado la estructura del barco. Las grietas en su casco también habían permitido que se filtrara agua.
El día después de los hechos, Meteonews calificó la gestión de la situación de “imperdonable” y el cantón pidió una investigación externa.
Un proyecto de 25 millones
Costará alrededor de 25 millones de francos reflotar el Simplon, que necesita una renovación completa, dada la magnitud de los daños y el estado general ya degradado del barco. Pero no lo volveremos a ver navegando por el lago Lemán en el corto plazo. La financiación para los estudios del proyecto no comenzará hasta el próximo año.
Related News :