Si François Bayrou logra que se apruebe un presupuesto y permanezca en Matignon, quizás se lo deba a algunos de sus adversarios políticos históricos, empezando por los socialistas. Después de unos primeros contactos positivos con Bercy y Matignon, los diputados del Partido Socialista (PS) decidieron, en una reunión de grupo, el martes 7 de enero, iniciar negociaciones reales sobre un acuerdo presupuestario con el gobierno del centrista. “No hubo disensión sobre el tema” dijo un participante. Inmediatamente se produjeron nuevos encuentros entre socialistas y funcionarios del Ministerio de Economía. Otros están previstos en los próximos días. También se envió al gobierno un documento que resume las demandas específicas del PS.
En ambas partes el objetivo es claro. El objetivo es llegar a un acuerdo global de aquí a la declaración de política general que presentará François Bayrou el 14 de enero. El Gobierno quisiera llegar a un acuerdo con la izquierda moderada sobre un proyecto de presupuesto lo suficientemente consensuado como para no votar a favor de la censura en el probable caso de que el Primer Ministro utilice el artículo 49.3 de la Constitución para aprobar su presupuesto. sin voto.
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