Una vez inaugurado el proyecto, suscita mucha esperanza entre la población, porque facilitará la fluidez del tráfico y aumentará los intercambios comerciales. Con esta financiación, el Grupo del Banco reafirma su deseo de convertir los corredores en poderosos caldos de cultivo económicos e industriales para el desarrollo de los países africanos.
Además, para la institución, de hecho,‘inversión en infraestructura‘La escala puede transformar las economías y las condiciones de vida de las personas en África. Esta carretera constituye un tramo del corredor viario estratégico Abiyán-Lagos, de 1.028 kilómetros de longitud, auténtica columna vertebral del desarrollo de África Occidental, que debe conectar Togo, Benín, Ghana, Costa de Marfil y Nigeria.
El Banco desempeña un papel destacado en la movilización de financiación para este gigantesco proyecto integrador. Ahora, con carriles ampliados 2×2, con pavimento de calidad e iluminación solar, el tramo de vía afectado por el megaproyecto Abiyán-Lagos garantiza una mayor seguridad para automovilistas y peatones, en particular gracias a la construcción de puentes peatonales elevados, diseñados para proteger a los más vulnerables. usuarios.
Actividades prósperas
No muy lejos de las obras del hotel, su restaurante, “le Miadjoe”, está idealmente situado frente al‘desembocadura del lago Togo, un nuevo centro turístico cada vez más popular entre los turistas. Allí también‘es la proximidad de la carretera lo que determinó la‘Ubicación del restaurante. El empresario constató rápidamente un claro aumento de la afluencia, impulsado por la fluidez de los desplazamientos gracias a la carretera rehabilitada y al nuevo alumbrado nocturno instalado, que permite a los clientes venir con total tranquilidad, de día y de noche.
«Desde‘Tenemos la carretera, tenemos muchos más clientes y, como la carretera está iluminada por la noche, también pueden quedarse hasta tarde”, dice Lionel a la prensa, convencido de haber visto la oportunidad adecuada. Una bendición para un establecimiento que suele cobrar vida al anochecer ofreciendo espectáculos musicales y eventos culturales.
Mejor aún, también se han modernizado las infraestructuras auxiliares, como el puesto de control fronterizo Sanvee Condji/Hillacondji entre los dos países, donde las operaciones ahora son más fluidas, favoreciendo el transporte de mercancías y el movimiento de residentes. El puesto fronterizo representa un nuevo enfoque para la gestión de flujos fronterizos: eficiente, rápido y adaptado a las‘crecimiento del comercio entre los países de la región.
Más que‘Simple proyecto de carretera, el tramo rehabilitado Lomé-Cotonú encarna una integración regional exitosa, acompañada de un cierto dinamismo económico, con repercusiones especialmente positivas que van más allá de las fronteras de los dos países afectados. Entre Lomé y Cotonou, Lionel Djondo n‘no es el único que se beneficia de esta transformación. Recorriendo la carretera, de 150 kilómetros de longitud, ahora ampliada y modernizada, descubrimos cómo rediseña la vida de toda una región y estimula‘actividad económica de muchas comunidades.
Movilidad a toda velocidad
“El camino construye la integración africana al desarrollar tanto una economía de proximidad como una economía de distancia. Es verdaderamente una herramienta esencial para construir el desarrollo en paz”, continúa el consejero, que saluda el fortalecimiento del comercio, la fluidez de los intercambios humanos y la mejora de la cooperación regional.
Por su parte, Maël Gnancadja, concesionario de automóviles entre Lomé y Cotonou, también se beneficia de la dinámica regional de‘integración. Radicado en Lomé, donde desarrolla la mayor parte de sus actividades, recorre esta sección todos los fines de semana para encontrar a su familia en el vecino Benín. La fluidez del paso en el renovado puesto fronterizo de Sanvee Condji/Hillacondji ha facilitado enormemente los viajes tanto personales como profesionales.
Finalmente, a lo largo de 150 kilómetros, esta carretera renovada conlleva una verdadera transformación social y económica. La infraestructura encarna más que su función principal: es una verdadera herramienta de inversión y transformación. Pero también es un acelerador del desarrollo y la integración para toda esta parte de África. Es este tipo de infraestructura lo que el continente necesita hoy para consolidar su economía y participar activamente en el crecimiento global.