Lo buscaban desde hacía años. Othman El Ballouti, uno de los principales narcotraficantes belgas, cuya extradición Bélgica exige desde hace varios años, fue detenido en Dubai, informó el martes una fuente judicial.
Recientemente fue condenado en ausencia en Bélgica por importar cientos de kilogramos de cocaína a través del puerto de Amberes. También ha sido objeto de sanciones del Tesoro estadounidense desde 2023 como sospechoso de importación y distribución de cocaína en Estados Unidos.
“Hemos conseguido su detención, ahora veremos si conseguimos su extradición”, declaró la fuente judicial. Según un artículo de Le Monde de 2022, Othman El Ballouti posee una decena de propiedades en Dubái, con una fortuna estimada, según la prensa belga, en más de ocho millones de dólares. Es objeto de una “alerta roja”, emitida por Interpol para los delincuentes más peligrosos.
“Hay varios expedientes por los que se solicita su extradición, sería el quinto” sospechoso entregado a Bélgica por los Emiratos Árabes Unidos desde la firma en 2021 de un acuerdo de cooperación bilateral, subrayó la misma fuente. En diciembre de 2021 se firmó un acuerdo de extradición entre los Emiratos Árabes Unidos y Bélgica, que desean entregar a varios traficantes activamente buscados.
Fue en particular el desmantelamiento de la red telefónica cifrada Sky ECC ese año lo que puso a los belgas tras la pista de los “barones” exiliados en Dubai. Se trataba entonces de ejecutar al menos siete órdenes de detención internacionales.
Según las autoridades belgas, las solicitudes de extradición se refieren actualmente a una veintena de sospechosos, de los cuales hasta la fecha sólo cuatro han sido detenidos y entregados por los Emiratos Árabes Unidos. Uno de ellos, Nordine El Hajjioui, otra figura del narcotráfico en Amberes, fue entregado a Bélgica a finales de marzo.
Othman El Ballouti, que se enfrenta a una condena en rebeldía de siete años de prisión dictada en septiembre, también está implicado en otro proceso por tráfico de drogas en el que se solicitó contra él una pena de veinte años este otoño, según los medios belgas. Se espera la sentencia pronto.
