Un trabajador sanitario que falsificó más de 1.000 pasaportes de vacunas durante la pandemia ha sido condenado a dos años menos de prisión por día. Adams Diwa se embolsó 150.000 dólares poniendo en peligro la salud de los quebequenses, insistió el fiscal de la Corona.
Publicado a las 15:24
“El abuso de confianza es indescriptible. Indecible. Es terrible. De verdad, me estoy conteniendo. Se trata de 1.250 acciones motivadas por la codicia, mientras usted tenía importantes responsabilidades que le había confiado el Estado”, denunció el lunes el juez Pierre Dupras en el tribunal de Montreal.
Adams Diwa, residente de Terrebonne, se declaró culpable en mayo pasado de los cargos de abuso de confianza por parte de un servidor público y fabricación de documentos falsos. Fue capturado por la Unidad Permanente Anticorrupción (UPAC) en noviembre de 2023.
Este funcionario de 25 años trabajó como agente administrativo en el centro de vacunación del Estadio Olímpico en el otoño de 2021. Trabajó ante el CIUSSS de l’Est-de-l’Île-de-Montréal. En dos meses, inscribió cerca de 1.250 vacunas falsas en el registro de vacunación de Quebec en beneficio de 630 personas. Luego obtuvieron un pasaporte de vacunación sin estar vacunados.
“Era dinero muy fácil y su seguridad era tan pobre que era como si estuvieran diciendo: ¡hazlo! », confió Adams Diwa a La prensa en 2022.
Adams Diwa se embolsó 150.000 dólares de su plan fraudulento. La policía encontró 100.000 dólares en una cuenta bancaria, 30.000 dólares en efectivo en su casa y el resto en su propiedad. Las pruebas no revelan quiénes fueron sus cómplices que le proporcionaron las listas de nombres.
Fiscal de la Corona Mmi François Boillat-Madfouny alegó varias circunstancias agravantes para justificar esta sugerencia común de sentencia al Tribunal. Pero uno de ellos destacó: el importante abuso de confianza.
“Socavar la integridad de un registro estatal es algo grave. La vacunación fue la herramienta que encontró el Estado para protegernos a cada uno de nosotros ante esta crisis sanitaria. La vacunación era la única solución. Y Diwa ha puesto en peligro la tarea del Estado de proteger a su pueblo. Este es un factor muy agravante”, insistió M.mi Boillat-Madfouny.
Sin embargo, algunos factores atenuantes actuaron a favor del delincuente, entre ellos su bajo riesgo de reincidencia, su admisión de culpabilidad, su participación en la investigación y su corta edad.
“Era innegable que había que imponer una pena de prisión para enviar un mensaje claro de disuasión y denuncia”, concluyó el fiscal de la Corona.
El juez Dupras respaldó esta recomendación conjunta. METROmi Laurence Ledoux defendió al acusado.