Los resultados electorales aún no se conocen, pero una primera encuesta a pie de urna sugiere que la extrema derecha no ganó estas elecciones tan seguidas en Europa, a pesar de un fuerte avance.
Los socialdemócratas estarían a la cabeza de las elecciones legislativas del domingo en Rumanía, pero la extrema derecha ha logrado un gran avance, según un sondeo a boca de urna realizado y publicado al cierre de los colegios electorales, que hay que tomar con cautela.
El PSD obtendría el 26% de los votos, por delante de los demás partidos. Sin embargo, todas las fuerzas de extrema derecha combinadas alcanzarían el 30%, estimaciones que, de confirmarse, presagian un Parlamento fragmentado y negociaciones difíciles para formar gobierno.
Estos sondeos se ven confirmados por el momento por resultados parciales, que dan ventaja en número de escaños a los socialdemócratas, al tiempo que confirman la clara progresión de la extrema derecha que pone en duda la alianza del país con los occidentales.
Si se confirman estos resultados, los socialdemócratas deberían tener una ventaja suficiente para formar gobierno, pero los nacionalistas tendrán una fuerza legislativa sin precedentes. Además, la coalición que se formará se topará con importantes desacuerdos presupuestarios, mientras que el déficit del país se ha convertido en el mayor de toda la Unión Europea.
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