La garantía individual de poder adquisitivo (Gipa) no habrá sobrevivido al golpe anunciado a las finanzas públicas. Si se hubiera pagado en 2024, habría alcanzado montos récord debido a la alta inflación de los últimos años.
“El máximo habría sido 5.000 euros”, asegura Eric Saizeau, profesor de matemáticas, que se ha acostumbrado a examinar y verificar discursos y decisiones que afectan a la remuneración de los funcionarios, en particular la de los profesores. Hasta ahora, las cantidades concedidas podían oscilar entre unos pocos euros y unos 2.500 euros brutos. Con una media en torno a los 700 euros en 2023.
Cuestión de proporción
Además de la búsqueda de ahorros, la oficina de Guillaume Kasbarian, Ministro de Administraciones Públicas…
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