Desde el 7 de octubre de 2023, la guerra declarada por Israel contra el movimiento Hamás en la Franja de Gaza ha causado la muerte de 43.799 personas, según el comunicado difundido el sábado por el Ministerio de Sanidad del asediado enclave palestino. Esta información llega en el día 407 del conflicto, cuando el ministerio califica esta tragedia de “genocidio israelí”.
Como parte de este prolongado conflicto, el ejército israelí habría perpetrado, según el ministerio, tres masacres contra familias de Gaza en las últimas 24 horas, que provocaron al menos 35 muertos y 111 heridos. Además, muchas víctimas siguen atrapadas bajo los escombros y en las calles, y los equipos de rescate tienen dificultades para llegar a ellas.
A pesar de una resolución del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas que pide el fin inmediato de los combates y la orden de la Corte Internacional de Justicia de medidas cautelares en Gaza, esta guerra continúa. Con el apoyo de Washington, Tel Aviv continúa sus operaciones militares desde hace más de un año.
La Corte Penal Internacional (CPI), con sede en La Haya, vio cómo su fiscal general solicitaba la emisión de órdenes de detención contra el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, y el ex ministro de Defensa, Yoav Gallant, acusados de “crímenes de guerra” y “crímenes contra la humanidad”.
Además, los esfuerzos de mediación liderados por Estados Unidos, Egipto y Qatar para obtener un alto el fuego en Gaza y un intercambio de prisioneros entre Israel y Hamás siguen sin tener éxito. La firme posición de Benjamín Netanyahu, negándose a detener la guerra, constituye un obstáculo importante para estas negociaciones.
Senegal
