El Gobierno rechazó la enmienda relativa al aumento del umbral del volumen de negocios anual de los autónomos, fijado en 80.000 dirhams. Esta decisión debería, según el ejecutivo, garantizar la transparencia fiscal y luchar contra el fraude.
El miércoles 13 de noviembre, los diputados de la Comisión de Finanzas y Desarrollo Económico, reunidos en la Cámara de Representantes, aprobaron la primera parte del proyecto de ley de finanzas (PLF) para el año 2025.
Durante esta sesión se presentaron más de 540 enmiendas, incluida la relativa a los empresarios autónomos que propone aumentar el umbral de volumen de negocios, más allá del cual se aplica una tasa de descarga del 30% para los servicios prestados al mismo cliente. En efecto, esta enmienda propone elevar a 100.000 dírhams el umbral de facturación para los empresarios autónomos, actualmente fijado en 80.000 dírhams, algo que el Gobierno no ha aprobado.
De hecho, dicha enmienda fue rechazada por el ejecutivo a pesar del apoyo que recibió de los grupos parlamentarios, tanto mayoritarios como de oposición. Según el gobierno, aumentar el umbral de facturación podría dar lugar a abusos y aumentar el riesgo de fraude fiscal.
En este sentido, el ministro delegado encargado de Presupuesto, Faouzi Lekjaa, indicó a la Comisión de Finanzas y Desarrollo Económico que esta decisión pretende evitar posibles abusos fiscales y preservar el régimen de autónomos. Subrayando en este sentido, que un aumento del umbral sin una supervisión adecuada podría incitar a determinados actores económicos a abusar del régimen de autónomos para eludir obligaciones fiscales. Así, algunas empresas podrían recurrir masivamente al estatus de autónomos para evitar contratar empleados que se beneficien de derechos y beneficios sociales.
En este sentido, Lekjaa ha recordado que dicha decisión no pretende privar a los autónomos de nuevas oportunidades, sino que busca mantener un marco laboral sano y justo donde los jóvenes sean contratados de forma coherente con las reglas del mercado laboral. , garantizando al mismo tiempo que el régimen de autónomos no se convierta en un pretexto para un empleo encubierto que eluda la legislación social y fiscal.
El ministro también indicó que el tratamiento fiscal de los autónomos sigue siendo limitado, subrayando que ahora son necesarios ajustes, sobre todo porque determinadas profesiones, como las del sector cultural, generan ingresos que a menudo superan el límite actual. Así, el Gobierno prevé reforzar el marco legal para abordar estas cuestiones y lanzar un debate en profundidad sobre la evolución de este régimen que ya cuenta con 434.289 autónomos con 30.297 nuevas altas durante los ocho primeros meses de 2024, generando así unos ingresos fiscales de 37 millones de dirhams.