La situación es la misma todos los años: las selecciones nacionales son muy diferentes al inicio de la temporada que durante un Campeonato del Mundo, durante el cual muchos ejecutivos regresan de la NHL. La Copa Karjala, disputada este fin de semana en Finlandia, todavía dejó algunos profesores interesantes para la selección suiza.
Los hombres de Patrick Fischer terminan el torneo con tres puntos: una derrota contra Finlandia en la prórroga, una victoria contra Suecia en los penaltis y una derrota por 5-2 ante la República Checa. Dos buenas actuaciones ante los colosos del hockey mundial, que dieron paso el domingo a un partido mucho más complicado para una pálida selección nacional. Los vigentes campeones del mundo no necesitaron esforzarse en su talento para liderar, ya, 3-1 después de veinte minutos.
El técnico Patrick Fischer aprovechó este fin de semana finlandés para dar tiempo de juego a sus jóvenes porteros Senn y Charlin. Ambos vivieron algunas dificultades, como el gol encajado por Gilles Senn contra Suecia el sábado. La última defensa de Ambri, que había pensado que había bloqueado el disco antes de que terminara en el fondo de su portería, se recuperó bien. Sustituyó a Charlin en el minuto 21 el domingo, después de un comienzo de partido complicado para el portero de Langnau que le dio dos goles a los checos.
En el partido también pudieron destacar jugadores jóvenes como Chanton, autor de un magnífico empate 1-1 el domingo, Rochette y Biasca. Para eso están los torneos del Euro Hockey Tour, cuyos partidos a menudo tienen la apariencia de partidos amistosos. El año pasado, los suizos pasaron como fantasmas por esta gira antes de llegar a la final del Mundial.
Lo que explica en gran medida la derrota suiza del domingo es la ausencia de muchos directivos que estuvieron allí durante los dos primeros partidos. Andrighetto, Malgin, Kukan y Martí regresaron el sábado por la tarde a Zúrich para preparar el encuentro de la Liga de Campeones previsto para el martes contra los alemanes en Straubing. Muy presente, Andrés Ambühl marcó el domingo el segundo gol de Suiza, a los 41 años.
Los elementos menos experimentados pudieron adquirir experiencia, pero no olvidaron la dependencia suiza de unos pocos ejecutivos. Seguramente tendrán la oportunidad de seguir progresando durante la próxima etapa del Euro Hockey Tour, en un buen mes en Friburgo.