En tierra, el sol volvió el jueves, 48 horas después de la tragedia, produciendo un llamativo contraste con el espectáculo de desolación que ofrecen todas las localidades de la zona.
En Paiporta, un pueblo mártir de 25.000 habitantes en el suburbio del sur de Valencia, murieron al menos 62 personas, según la alcaldesa, Maribel Albalat.
Aún atónitos, los vecinos intentaron limpiar las calles, cubiertas de barro viscoso, en un escenario del fin del mundo. “Ya no hay posición empresarial”dijo David Romero, un músico de 27 años.
Levantada la alerta roja en Castellón
De visita en Valencia, capital de la región del mismo nombre, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró que el episodio de mal tiempo no se produjo “no terminado” y llamó a los habitantes de esta región a “quedarse en casa” y a “no salgas”.
Se refería a una “alerta roja” (nivel máximo de alerta sinónimo de riesgo extremo) lanzada el jueves por la mañana por la Agencia Nacional de Meteorología (Aemet) para determinadas zonas de la provincia de Castellón, situada justo al norte de la de Valencia, donde cayeron fuertes lluvias. . Sin embargo, la alerta fue levantada por la tarde, pasando a color naranja, lo que refleja una reducción del peligro.
Torres también anunció que el gobierno central había acordado poner a disposición del gobierno regional “todos los recursos del ejército” para abrir caminos y llegar “en cada rincón” de la zona afectada, lo que sugiere que algunas aldeas todavía están aisladas del mundo.
También indicó que 39 personas han sido detenidas y que “ante los saqueos y los crímenes”las fuerzas de seguridad se manifestarían “firmeza absoluta”.
Más de 1.200 soldados ya están desplegados sobre el terreno, principalmente en la región de Valencia, junto con bomberos, policías y socorristas. Según las autoridades, miles de personas siguen sin electricidad en la región.
noche de pesadilla
“Nunca pensé que viviría esto”confió Eliu Sánchez, vecino de Sedavi, un pueblo de 10.000 habitantes en las afueras de Valencia, relatando una noche de pesadilla.
“Vimos a un joven en un terreno baldío refugiarse en el techo de su auto”afirma este electricista de 32 años. “Intentó saltar” en otro vehículo, pero el actual “se lo llevaron”.
Los trenes de alta velocidad entre Madrid y Valencia, suspendidos desde el miércoles, seguirán así al menos durante “dos o tres semanas”indicó el ministro de Transporte, Óscar Puente.
Un año de precipitaciones
Según la Aemet, durante la noche del martes al miércoles cayeron más de 300 litros de agua por metro cuadrado (o 30 cm) en varias localidades de la Comunidad Valenciana, con un pico de 491 litros/m2 (49,1 cm) en el pequeño pueblo de Chiva. es el equivalente “de un año de precipitaciones”aclaró.
La Comunidad Valenciana y la costa mediterránea española en general experimentan regularmente, en otoño, el fenómeno conocido como “gota fría”, una depresión aislada a gran altura que provoca lluvias repentinas y extremadamente violentas, a veces durante varios días.
Pero el fenómeno nunca había alcanzado tal magnitud. “La peor gota de frío del siglo”tituló la portada del diario El País.
En un primer análisis, los científicos de World Weather Attribution, una red de referencia que estudia el vínculo entre los fenómenos meteorológicos extremos y el cambio climático, estimaron el jueves que “El cambio climático es la explicación más probable” a la violencia del mal tiempo en España.
Según este análisis, las lluvias torrenciales que azotaron España fueron un 12% más intensas y el doble de probables que si el clima no se hubiera calentado.