2025 es sinónimo de nuevas normas en materia de contaminación acústica emitida por los coches. Los requisitos en esta materia fueron actualizados el pasado 1 de enero, según recordó este martes el TCS en un comunicado de prensa. De hecho, el Consejo Federal ha decidido añadir el ruido de escape evitable a la lista de molestias a evitar. Sin embargo, esto no supone una revolución para la policía cantonal del Jura, que es responsable de aplicar las normas vigentes.
Con estas nuevas disposiciones, el Consejo Federal pretende sancionar mejor el ruido excesivo de los vehículos. La medida se produce tras la adopción de una moción por parte del Parlamento. En concreto, ahora está explícitamente prohibido producir ruidos de escape, en particular detonaciones, si esto puede evitarse, como explica el TCS. También se adaptan los importes de determinadas multas, en particular cuando un automovilista deja el motor en marcha innecesariamente, con una multa que aumenta de 60 a 80 francos.
Una estrategia sin cambios para la policía.
Estas nuevas normas no cambian fundamentalmente la estrategia de la policía cantonal del Jura en este ámbito, pero proporcionan un brazo de influencia un poco más largo, según Thierry Erard, jefe del grupo de tráfico. Por lo tanto, la policía continuará con los controles aleatorios realizados en colaboración con expertos de la Oficina de Vehículos.
También se han realizado en Ginebra pruebas con radares antirruido. Sin embargo, según el Consejo Federal, todavía es necesario examinar varios obstáculos antes de que se puedan desarrollar e implementar bases jurídicas concretas en Suiza. /alr
