El gigante sueco de baterías eléctricas Northvolt anuncia su declaración de quiebra. Sorprendentemente, la empresa se convertiría en una de las puntas de lanza de la respuesta europea a la competencia china en este ámbito. Su director general acaba de dimitir.
La empresa de baterías eléctricas Northvolt se encuentra en una situación financiera peligrosa
Desde hace varios meses, Northvolt lucha por alcanzar sus objetivos de producción. METROpero sobre todo, para mantener su equilibrio financiero. Según documentos internos, la empresa no ha cumplido sus objetivos de producción semanales desde septiembre de 2024. Estos retrasos empeoran una situación ya complicada. marcado por el fracaso de un plan de rescate de 300 millones de dólares.
Ante problemas financieros, el grupo anuncia que ha solicitado protección bajo la ley de quiebras estadounidense. Este procedimiento tiene como objetivo reordenar la deuda de la empresa, ajustar su actividad a las expectativas de sus clientes y preservar sus operaciones. En resumen: Northvolt se declara en quiebra.
Para respaldar sus actividades a corto plazo, Northvolt dispone de una financiación de 145 millones de dólares, garantizada por sus activos, así como de una contribución de 100 millones de dólares de sus clientes. Estas medidas permitirán a la empresa continuar su actividad a la espera de una reestructuración completa, prevista para finales del primer trimestre de 2025. Al menos, los compradores son bienvenidos antes de una posible liquidación.
Una estrategia fallida
Las dificultades de Northvolt llevaron a decisiones drásticas. A finales de septiembre de 2024, el grupo anunció la eliminación de 1.600 puestos, es decir, casi el 25% de su plantilla. Al mismo tiempo, se suspendieron las obras en su principal centro de producción en Skellefteå, en el norte de Suecia.
La estrategia de Northvolt también se ha reorientado hacia la fabricación de celdas de baterías eléctricas, abandonando otras etapas de la cadena productiva como el reciclaje o la fabricación de cátodos. Esta reestructuración permitió reducir costes a corto plazo, pero debilitó el modelo general de la empresa.
En este contexto de crisis, Northvolt anuncia la dimisión de su director ejecutivo y cofundador, Peter Carlsson. Ex ejecutivo de Tesla, ayudó a hacer de Northvolt un actor importante en el campo de las baterías para vehículos eléctricos. Peter Carlsson deja la dirección a un dúo de directores interinos, que tendrán la difícil tarea de estabilizar la empresa mientras esperan el nombramiento de una nueva junta directiva.