El 31 de mayo, la asociación de consumidores Facua, que había indicado que había presentado una denuncia contra estas prácticas por considerarlas abusivas, informó de una multa de más de 150 millones de euros contra cuatro compañías aéreas.
Ante un recurso de las empresas afectadas, el Ministerio de Consumo “desestimó los recursos presentados por estas compañías aéreas” y sancionó a cinco empresas por un importe finalmente cercano a un “total de 179 millones de euros”, indicó en un comunicado. La compañía Ryanair recibe la multa más elevada, 107,7 millones de euros, precisa el ministerio en este comunicado. Le siguen Vueling (39,3 millones de euros), easyJet (29,1 millones), Norwegian (1,6 millones) y Volotea (1,2 millones).
Decisión “histórica”
Según el comunicado, estas cinco empresas fueron sancionadas por cobrar por el equipaje de mano de los pasajeros, pero también por la elección del asiento cuando un viajero acompaña a personas dependientes, como personas discapacitadas o niños.
La multa sanciona también la prohibición decidida por estas empresas de pagar en efectivo la compra de billetes y la introducción de una “tarifa desproporcionada y abusiva” por la impresión de tarjetas de embarque en los aeropuertos. “Las sanciones incluyen también la prohibición expresa de continuar con las prácticas sancionadas”, especifica el ministerio.
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