TESTIMONIOS – Los altos ejecutivos, diplomáticos y altos funcionarios que trabajan en el extranjero son muy buenos clientes para los propietarios sin escrúpulos. El resultado son alquileres prohibitivos, cargos de alquiler inflados artificialmente y daños cobrados a precios elevados.
« Los dueños conocen nuestros salarios. Saben cómo funcionan las expatriaciones. Y como el sistema definitivamente está a su favor, siempre nos joden.» Son altos directivos de grandes grupos, diplomáticos, altos cargos de organismos internacionales, periodistas… Aumentan el número de estancias en el extranjero, traslados y mudanzas en función de las oportunidades profesionales que tienen a su alcance. ¿Una vida de ensueño? No en todos los aspectos. Y menos aún en el sector inmobiliario, ámbito en el que muy a menudo tienen la impresión de tratar con propietarios sin escrúpulos y muy codiciosos.
Emmanuel* no pierde los estribos. “ No somos más que palomas que hay que desplumar. » Este alto funcionario europeo abandonó Bruselas la primavera pasada, dejando a su propietario la friolera de 9.000 euros, incluidos 7.500 euros como compensación por su apresurada salida y 1.500 euros por…
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