El Ministro de Colaboración con los Territorios y de Descentralización quiere acabar con los rumores sobre la devolución del impuesto a la vivienda. Propone consultar con los funcionarios electos locales sobre la participación en la vida en un municipio.
“No habrá retorno al impuesto sobre la vivienda”, asegura confiadamente a Le Parisien este domingo 3 de noviembre Catherine Vautrin, ministra de Asociación Territorial y Descentralización. Abolido en 2023 durante el mandato anterior del gobierno dimitido de Emmanuel Macron, el impuesto a la vivienda ha vuelto al centro del debate parlamentario sobre el Presupuesto 2025.
18 mil millones de euros de déficit
Este impuesto, tradicionalmente recaudado por los municipios, representa un déficit de al menos 18 mil millones de euros en las finanzas públicas. La compensación proporcionada por el Estado no parece suficiente para varios cargos electos franceses que han pedido el restablecimiento del impuesto sobre la vivienda.
Para Catherine Vautrin, no se trata de volver sobre el tema, pero se dice dispuesta a “reanudar los trabajos en materia fiscal iniciados por los cargos electos del CFL, el comité local de finanzas”.
“Probablemente necesitemos ver cómo podemos permitir que las comunidades controlen mejor sus recursos”, explica. Recordemos que se pide a las comunidades que hagan un esfuerzo de 5.000 millones de euros de ahorro adicional para restablecer las cuentas públicas.
“Hacer responsables a todos de la importancia del coste”
Por lo tanto, a principios de 2025 está prevista una consulta con los cargos electos locales para discutir el tema de “la participación de nuestros conciudadanos en todos los usos de la ciudad”. Se trata, pues, de “hacer responsables a todos de la importancia del coste” del gasto comunitario.
“La deuda francesa es tan costosa que se ha convertido en el segundo mayor presupuesto del país. Debemos pedir a todos que sean responsables”, declaró Catherine Vautrin a Le Parisien.
Sin devolución del impuesto sobre la vivienda, el ministro se muestra bastante vago pero considera que la “contribución ciudadana al servicio público”, propuesta recientemente por la AMF (Asociación de Alcaldes de Francia), no es “ridícula”.