Nosteratu está ambientada en Wisborg, una ciudad alemana del siglo XIX donde vive una joven que es perseguida todas las noches por una figura de pesadilla. Su marido, un joven notario, parte hacia los Cárpatos para firmar una propiedad en Wisborg al Conde Orlok, un hombre misterioso que busca establecerse en la ciudad. Pero este último no tarda mucho en revelar sus diseños más oscuros…
Si la historia de esto Nosferatu 2024 te resulta familiar, porque está tomado de la película de 1979 de Werner Herzog, ¡una nueva versión del primer largometraje de vampiros de Murnau en 1922! Un trozo de historia que esconde una historia menos brillante ya que el productor Albin Grau, descontento de haber obtenido los derechos para adaptar la legendaria obra de Bram Stoker, Drácula, decidió seguir adelante cambiando los nombres. Drácula se convierte en OrlokJonathan Harker se convierte en Thomas Hutter y Van Helsing se convierte en von Franz. Reemplazamos Inglaterra con Alemania y listo. Bueno, el viaje a bordo del Demeter es mucho menos relevante ya que ya no cruzamos el Canal, pero eso no importa.
Excepto que Coppola, que tenía los derechos sobre él, se hizo cargo del verdadero Drácula en 1992, transformándolo aún más en una figura romántica. Una obra que entró en la cultura pop y dio origen a muchas películas posteriormente. La criatura está ahora tan presente en el cine como un político en los tribunales y ya no podemos contar a los que quisieron hacer su parte. Buffy, Entretien avec un vampire, Crepúsculo, Morse, Lo que hacemos en las sombras…el chupasangre ha pasado por todas las iteraciones, todos los géneros, todos los países, todas las evoluciones. En cambio, Nosferatu Parece, por tanto, un paso atrás, una invitación a redescubrir lo que seguirá siendo a la vez el vampiro y el plagio original.
Una empresa que persigue desde hace varios años a Robert Eggers, cuyas obras (La Bruja, El Faro, El Norteño) se inspiraron libremente en el cine expresionista alemán, del que Nosferatu de Murnau es un importante representante. Desde la escena introductoria no es difícil comprender la pasión del cineasta por este mito, ya que encuentra en él un Terreno fértil para su estética barroca.
Poco afectado por el fracaso comercial de El norteñoel director traspasa los límites de su estilo ofreciéndonos una propuesta visual formidable, entre el clasicismo y la modernidad. Eggers toma prestado tanto de Murnau como de Herzog mientras mira a un Friedkin, pero sin desviarse jamás de su propia identidad. La dirección artística es fabulosa con el trabajo en las luces (interiores iluminados sólo por velas) y el sonido fantástico. El largometraje es una obra maestra. lo que le da al terror un hermoso escenario. Sólo hay que ver a su Orlok, una bestia monstruosa, cuya imagen se asocia constantemente a una idea de atrocidad. Como la sombra de su mano que se extiende sobre la ciudad, el terror es aquí insidioso; se propagará como una enfermedad incurable, no sin provocar varias conmociones en el proceso.
Nosferatu Es un malestar admirablemente elaborado por un equipo en la cima de su talento. La fotografía pictórica de Jarin Blaschke, el musica opresiva de Robin Carolan, el maquillaje, el vestuario, los decorados… todo contribuye a dar vida a un mitohasta el punto de sumergirnos en un campamento gitano, como si la pesadilla tuviera que ser real para que creyéramos en ella. Y funciona, sobre todo porque el cineasta consigue sacar lo mejor de su reparto, encabezado por Lily Rose-Depp, sorprendentemente brillante por su capacidad de mantenerse entre la fragilidad y la fuerza. Ella encarna un personaje femenino mucho más proactivo que todos sus mayores, sólo para desempolvar lo menos posible una historia de otra época.
Y si nos preguntáramos por qué Nosferatu En lugar de Drácula, debemos recordar la ambición de Eggers de crear una auténtica película de terror en la que el nombre original del vampiro esté ahora demasiado asociado a una historia de amor torturado. Con Orlok, el director retrata a una criatura monstruosa que ha recuperado su apetito, su instinto. Sin miedo a utilizar imágenes crudas, Eggers nos habla de un deseo animal primitivo, donde la carne domina los sentimientos. No es una cuestión de amor, sino de control, de un mal que carcome la mente y el cuerpo. El vampiro no es un hombre atractivo prisionero de su soledad, es una bestia cruel y sin alma, es el Vampyr, el Diablo.
Las bodas fatales matan
Si Robert Eggers crea una magnífica pesadilla, sus predecesores lo persiguen demasiado como para dejar realmente su huella en el mito. Sí, está haciendo una película a su imagen, pero dentro de una historia que no le pertenece y que ha quedado demasiado impregnada en el imaginario colectivo para encontrar su identidad en 2024. Como decíamos en el preámbulo, el vampiro Drácula o no, es una figura omnipresente en la cultura pop hasta el punto de que, para sorpresa de todos, los autores ya no dudan en reinventarla con mayor o menor éxito. Aquí, la inspiración es demasiado fuerte dejar espacio para la innovación.
A la salida de este Nosferatu, Recordamos la atmósfera general que provoca ansiedad, sus magníficos planes, pero permanecemos espectador de una historia conocida, de un cuento que se inspira en el pasado sin apropiarse de él. ¿Cómo involucrarnos emocionalmente en una obra que navega por territorio conquistado sin aportar la chispa capaz de reiniciar la máquina? Nosferatu Es un hermoso homenaje que nunca pretende ir más allá de este marco, por lo que lucha por justificar su existencia. Una magnífica obra efímera de la que nos quedamos fuera.
Una falta de implicación dañina, sobre todo porque tememos que sus efectos estilísticos y su recorrido marcado frenen a un público cuyos primeros ecos pueden haber vendido demasiado como película de terror del año mientras apenas utiliza ningún código de terror moderno. Y si sigue siendo, hasta el día de hoy, la película de mayor éxito estético de su autor sobre un tema prometedor para el gran público, es difícil imaginar que esta nueva versión de Nosferatu puede lograr derrotar a algo más despiadado que el vampiro: la taquilla.
???? Para no perderte ninguna novedad del Journal du Geek, suscríbete a Google News. Y si nos amas, tenemos un boletín informativo todas las mañanas.