El Villarreal sigue soñando despierto. El ‘submarino amarillo’, que este año se queda sin competiciones europeas, continuó su racha al imponerse por 3-1 a Las Palmas. El equipo de Marcelino García Toral sufrió mucho ante Las Palmas a pesar del resultado del marcador.
El cuadro de Castellón asaltó la tercera posición del campeonato y se colocó entre el Madrid y el Atlético, que empataron en un bochornoso derbi en el Metropolitano. Las Palmas sigue anclado en la última posición y todavía no ha ganado, aunque estuvo cerca de haber cambiado su destino.
El equipo de Carrión jugó muy bien y puso las cosas difíciles al Villarreal, que empató con Un gran gol de Fábio Silva. Sin embargo, Alex Baenacon una asistencia a Barry y un gol en los minutos finales, acabó con la rebelión del canario, que pitó y molestó a su rival hasta obligarle a callarse.
Pépé ataca primero
Villarreal y Las Palmas, dos equipos que cuidan el balón, intentaron imponer su ley en el partido y esa batalla la ganó el equipo de Carrión, que fue el primero en causar un susto en La Cerámica. En el minuto 11, Mcburnie hizo un pase en profundidad a Moleiro, que causó molestias a Kiko Femenía y se dirigió a la cocina para, tras levantar la cabeza, regalar el gol a Fábio Silva. El portugués, con todo a su favor, envió la pelota de una manera incomprensible.
Allí llegó el 0-1 para el conjunto ‘pio-pio’, que dejó hacerlo por unos instantes al conjunto de Marcelino. Pépé mandó el balón por las nubes en una acción e Ilias Akhomach, que continuamente intercambiaba posiciones con el francés, metió su pierna izquierda pero su disparo se fue desviado.
La respuesta de los visitantes llegó en forma de un cabezazo en picada de Mcburnie. El escocés aprovechó un centro medido de Benito al área para sacar un disparo directo que se fue al palo izquierdo. Diego Conde voló hacia ese lado y metió una mano más que salvadora. Las Palmas apareció más sobre el área local y Moleiro filtró un balón hacia Fábio Silva, que encontró a Bailly y al portero.
El Villarreal, muy incómodo en todo momento, encontró el camino hacia la portería de Horkas, que debutaba por la lesión de Cillessen. El croata, en el minuto 39, sacó un pie milagroso Sergi Cardonaquien capturó un rebote y centró delante del portero, quien liberó a su equipo del primero. El balcánico no tuvo tiempo ni de respirar, pues poco después rechazó un disparo de Ilias Akhomach. Lo que no pudo detener fue el disparo de Pépé que, al borde del descanso, culminó un contragolpe del puro poder de Barry.
El ‘show’ de Baena
Tras la reanudación, Marcelino dio entrada a Álex Baena y sustituyó a Denis Suárez, muy activo en la primera parte. Una jugada inteligente porque el almeriense Se desató la tormenta de Castellón en la recta final del partido. Pero antes de llegar a ese momento, Las Palmas dio vida al partido con el empate.
Fabio Silvaa los 47 minutos, se sacó e inventó esa ‘espinita’ del fracaso inicial una sutil vaselina para poner las mesas. Para mencionar el pasaje con el exterior de januzaj desde el otro extremo del campo. Con ese marcador, La Cerámica empezó a ponerse nerviosa hasta que Horkas, en el minuto 50, derribó a Pépé. El francés aprovechó una cortísima caída de Álex Muñoz al croata, que tuvo que lanzar un penalti. Álex Baena se hizo cargo y el balcánico, de gran estirada, evitó el 2-1.
El partido se abrió completamente y eso nos permitió ver oportunidades de gol. Januzaj, con un disparo desde media distancia, estuvo a milímetros de marcar si no fuera por la madera. El conjunto canario no cejó en su empeño por marcar el segundo y ahí estaba hasta que perdió el rumbo por culpa de Baena.
El centrocampista, lejos de molestarse por el penalti fallado, fue cogiendo confianza con el paso de los minutos y dando paso a su particular espectáculo. En el minuto 76 sacó un córner directo a la cabeza de Bailly, que saltó más que su marcador y Barry, a puerta vacía, empujó el balón a la red. Sin embargo, el árbitro lo anuló por fuera de juego del delantero, que se equivocó al meter la pierna.
Ese momento fue un punto de inflexión porque el Villarreal volcó el área de Horkas. El gol era cuestión de tiempo y en el minuto 84 llegó el golpe para la UD. Álex Baena lanzó un centro medido para Barry, que se quitó peso de encima quitarle el gol a un compañero. Sin embargo, Melero López volvió a levantar la mano, pero pronto cambió de opinión porque fue avisado desde la sala del VAR. Álex Suárez se interesó en la acción y el gol del francés subió al marcador.
Carrión metió a Jaime Mata desesperadamente sin éxito. Fue Baena, ya en el 97′, el que mató el encuentro con robo de balón de Comesaña. El andaluz corrió desde su campo hacia el área contraria, donde ejecutó a Las Palmas con un tiro raso al poste largo. 3-1 y todo visto para sentencia. El ‘submarino amarillo’ asciende hasta la 3ª plaza y consolida su posición en la Liga de Campeones, mientras que los isleños seguirán una jornada más en la última posición de la tabla y sin ganar, que es lo más preocupante.