El entrenador en jefe de los Cleveland Cavaliers, Kenny Atkinson, dijo antes del partido del miércoles contra el Oklahoma City Thunder que no era difícil motivar a sus jugadores para un enfrentamiento tan importante como ese. Fueron juegos como este contra los Toronto Raptors la noche siguiente los que representaron el desafío.
Eso resultó ser cierto ya que, comprensiblemente, los Cavs no salieron con el nivel de concentración que tenían la noche anterior. Demostraron ser humanos y no las despiadadas máquinas de baloncesto que aparentemente han sido durante toda la temporada. No ayudó que no tuvieran a Donovan Mitchell, quien normalmente ayuda a proporcionar energía en juegos que de otro modo carecerían de ella.
Los Cavs cayeron por 11 puntos en el segundo cuarto antes de cerrar el período con fuerza para empatar el juego. Cleveland luego quitó por completo el pie del acelerador en el tercero, ya que cedió 42 puntos en ese cuadro. La defensa fue un paso demasiado lenta en todo momento. Afortunadamente, su prolífica ofensiva los mantuvo a su alcance al entrar en el último cuarto.
Darius Garland fue una de las principales razones por las que la ofensiva fue tan buena. Continuó justo donde lo dejó en la impresionante actuación de ayer contra Oklahoma City. Consistentemente llegó a donde quiso en la cancha durante una noche en que los Cavs necesitaban desesperadamente una chispa.
Su capacidad para orquestar la ofensiva es lo más impresionante en una noche como ésta. Obtuvo sus puntos pero también se aseguró de que todos los demás en la lista comieran también. Su voluntad de mover el balón y luego alejarse de él permitió que sucediera.
Garland llevó la ofensiva en la recta final. Anotó o asistió en los últimos cinco tiros de campo de Cleveland, anotó los tres que sellaron el juego con 40 segundos restantes y luego congeló el juego en la línea con la multitud gritando en voz alta “MVP”. Garland terminó con 40 puntos con 14-22 en tiros con 9 asistencias y 2 robos.
Los actos heroicos al final del juego no fueron nada nuevo para Garland. Ha sido uno de los jugadores más decisivos de la NBA esta temporada, ya que llegó al partido disparando un 66,7% desde la cancha en partidos que estaban a cinco puntos en los últimos cinco minutos. Esta noche, anotó 14 puntos y consiguió 3 ayudas en el cuadro final.
Evan Mobley y Jarrett Allen también tuvieron presentaciones impresionantes. Mobley aportó 21 puntos, 11 rebotes y 6 asistencias. Allen añadió 18 puntos y 15 rebotes.
La defensa nunca estuvo bien esta noche. Pero eso no importa cuando la ofensiva es tan buena.
Grandes equipos vienen a jugar noche tras noche. Los Cavs una vez más demostraron que son así, incluso si esta no fue su mejor actuación. Aun así, esta cuenta en el libro de récords igual que la impresionante victoria de ayer.
