Serán juzgados el 31 de enero por el tribunal penal de Nanterre. Dos de los siete activistas propalestinos puestos bajo custodia policial la semana pasada, tras el partido de la Copa de Europa de baloncesto, que enfrentó al equipo local de Nanterre 92 contra los israelíes de Hapoel Holon, comparecerán ante el tribunal para “entrar en una zona de competición de un recinto deportivo que perturba el desarrollo de la competición”, así como por “violencia sin incapacidad”, según la fiscalía de Nanterre. Violencia cometida, para uno, contra un policía y para el otro, “por motivos de religión”.
A la espera de su juicio, estos dos hombres, de 21 y 31 años, de nacionalidad francesa el uno y belga el otro, fueron puestos bajo vigilancia judicial, con “prohibición de acudir a un recinto deportivo, de salir del territorio y obligación de registrarse”. y entregar el pasaporte”, añadió este martes la fiscalía de Nanterre. Los otros cinco activistas detenidos fueron presentados ante un delegado del fiscal en el marco de un despido.
El miércoles 18 de diciembre, varias personas entraron al polideportivo Maurice-Thorez ondeando banderas palestinas durante este partido clasificado como sensible por las autoridades. Tras esta intrusión que provocó la interrupción del partido durante varios minutos, regresaron rápidamente a las gradas donde, según imágenes filmadas por varios espectadores, fueron atacados por los aficionados de la selección israelí.
Este inicio del rifirrafe motivó la intervención del CRS presente para asegurar el encuentro, que acabó con la victoria del Nanterre (87-77). La presencia del público se mantuvo a pesar de los temores de “alteración del orden público” por parte de la ciudad de Nanterre, que había emitido un decreto municipal para que la reunión se desarrollara a puerta cerrada. Sentencia impugnada por la prefectura de Altos del Sena y finalmente anulada por el tribunal administrativo de Cergy (Val-d’Oise).