Roza, una joven cantante belga, transforma su desilusión en música íntima

Sacudida por su creatividad, pasó un breve período en la Academia, que consideraba demasiado convencional. Lo que ella quiere es más libertad. La guitarra eléctrica se convirtió entonces en su aliada y marcó el inicio de un camino autodidacta.

La pandemia, detonante de un reciclaje profesional

Estamos en 2020. La pandemia de COVID-19 está tocando las puertas de la humanidad, y con ella, su cuota de graves consecuencias. Si bien Roza se había embarcado en estudios de bioingeniería, este período puso en duda sus elecciones profesionales. Impulsada por el deseo de mejorar nuestra sociedad y contribuir a las cuestiones medioambientales, nuestra cantante tiene dificultades para proyectarse: “Durante la pandemia de Covid-19, estuve en una fase en la que ya no creía para nada en las estructuras existentes, aquellas en las que inicialmente tenía previsto venir y aportar soluciones a los problemas actuales”explica.

Ante este colapso interior, Roza decide entonces recurrir a la música. Una decisión motivada por el deseo de acercarse al mundo de una manera más sutil. El arte se convierte entonces en su refugio: “Para mí, el arte es realmente una especie de salvavidas cuando descubres que las cosas ya no tienen sentido”.

“Recuérdame la belleza”: un mensaje universal

Lejos de la idea de hacer música pesada y moralizante, la cantante intenta poner, en el centro de sus creaciones, la belleza de las cosas simples de la vida. En su título “Recuérdame la belleza”, nos invita a reconectarnos con nuestra capacidad de asombro: “Creo que todos, en nuestra vida diaria, a veces perdemos el sabor de la vida y nos olvidamos de sorprendernos”.

Imbuida de notas suaves, sumergiendo al oyente en una auténtica atmósfera de ligereza, “Recuérdame la belleza” es sin duda una de sus piezas que más ha viajado y conmovido al público. Aborda la dificultad de recordar la belleza que persiste en la vida, y el deseo de hacer una promesa: la de no olvidar las cosas bellas. “Esta canción seguirá acompañándome durante toda mi vida. El recordatorio es que es importante sorprenderse”.